El circuito de matanzas cierra la campaña con 8.000 participantes

Es el balance inicial que realiza la Diputación provincial tras la finalización del circuito, que ha atraído a más de 8.000 personas en este regreso. Según las estimaciones de la institución provincial, la situación provocada por el coronavirus ha dejado las actividades a un 50 por ciento de público del que podría participar pero, gracias a las medidas adoptadas por los municipios, no se produjeron contagios por coronavirus.

Si se compara con ediciones anteriores, en la campaña de 2019-2020 acudieron unas 11.000 personas, pero la situación era normal y la provincia carecía de restricciones como el uso de mascarilla y la distancia de seguridad.

En esta campaña de 2021-2022 sí se ha producido un incremento en el número de pueblos participantes. Así, el calendario se confeccionó este invierno con 47 localidades (36 en la anterior campaña), lo que supone un incremento de un 34 por ciento. Ha habido siete pueblos que sí participaron en años anteriores pero no ha sido en esta última edición por considerar que “aún no era momento de retomar una actividad tan multitudinaria”. En cambio, otros 18 localidades dieron el paso para organizar y celebrar esa cita y, de ahí, la diferencia existente.

El calendario oficial de matanzas se desarrolla desde el puente de diciembre hasta mediados de marzo, aproximadamente, salvo en la localidad de Cristóbal, que siempre inaugura el ciclo en el mes de noviembre con motivo de la festividad de San Martín, patrón del municipio. Según los datos aportados por la Diputación, las matanzas celebradas en el mes de diciembre se desarrollaron con normalidad y fue en enero y febrero cuando se produjeron los mayores problemas en cuanto a aplazamientos y suspensiones. Por el contrario, la situación se recompuso a mediados de febrero y pudieron recuperarse algunas de las matanzas aplazadas de enero como es el caso de municipios como Gallegos de Solmirón o Campillo de Salvatierra).

Al final, con los datos en la mano, el 64 por ciento de las matanzas se realizaron en las fechas programadas; el 15 por ciento se aplazaron y celebraron en marzo y el 21 por ciento restante, 10 en total, quedaron definitivamente suspendidas.

Con una inversión de 30.000 euros para promocionar la tradición matancera a cerca de medio centenar de pueblos de la provincia, el balance de la institución provincial salmantina es más que positivo.