La herramienta de la hostelería para no tener que bajar la temperatura

¿A qué se aferran si la hostelería no entra dentro de las excepciones? Los profesionales aseguran que la normativa en salud laboral les obliga a bajar el termómetro a 25 grados y de hecho recogen la nueva regulación del Gobierno para justificar esta alegación. “Los umbrales de temperatura deberán ajustarse, en su caso, para cumplir con lo previsto en el Real Decreto 486/1997, referido a seguridad y salud en los lugares de trabajo”, recoge literalmente la norma que en solo cuatro días de publicación ya ha levantado una gran polvareda y ha obligado a varias rectificaciones como la iluminación nocturna de los monumentos.

El presidente de los hosteleros salmantinos, Jorge Moro, tiene claro en que en la normativa debe prevalecer la seguridad de los empleados. “Estar con 27 grados es ilegal porque los primero debería ser la protección de los trabajadores y eso ya lo marca la normativa de salud laboral”, detalla. “No se tiene en cuenta —incide— solo los 27 grados que tiene el local, sino también todo el calor que genera el ejercicio físico que realizan los camareros y que puede provocar problemas de salud”.

Fuentes de la Consejería de Industria y Empleo de la Junta de Castilla y León están analizando con detalle el plan energético de Sánchez ya que aseguran que, entre otras cosas, no tienen claro quién debe aplicar las sanciones, así como el análisis de todas las quejas que le están trasladando los comerciantes o los hosteleros, como la disyuntiva sobre la salud laboral y el plan de ahorro energético. El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, anunció este jueves que solicitará una reunión urgente al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, para estudiar las posibilidades de recurrir al Tribunal Constitucional el “decretazo energético suicida de Sánchez”. Calificó como una “cacicada” este plan energético con el que, a su juicio, se busca “engañar y arruinar” a los españoles.