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El cura expulsado de Miami vivía con menores en la calle Pinzones y dio clase en otros dos centros salmantinos

El cura expulsado de Miami vivía con menores en la calle Pinzones y dio clase en otros dos centros salmantinos

Un exprofesor del Rufino Blanco ha confirmado su paso por este centro y por el Campo Charro a 'El País'

Viernes, 14 de diciembre 2018, 16:18

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Francisco Carreras, el sacerdote de la provincia de Salamanca acusado de abusos sexuales que expulsado de la diócesis de Miami en 1981, ha vuelto a ocupar los titulares de 'El País'. El diario nacional publica que cinco antiguos alumnos y un profesor confirman que también dio clases en el Campo Charro y en el Rufino Blanco, entre los ochenta y los noventa y los noventa y 2000 respectivamente. El paso por estos dos colegios salmantinos se suma a su paso por el centro privado Lorenzo Milani.Los directores del Campo Charro y del Rufino Blanco carecen de archivos para confirmar su paso por los centros y ninguno de los profesores actuales dio clase durante aquellos años. Sin embargo, un exprofesor del Rufino Blanco ha confirmado en declaraciones al diario nacional su paso por el Campo Charro donde "tuvo problemas y le echaron" por lo que posteriormente fue trasladado al otro centro.Cinco alumnos a los que Carreras dio clase en el Rufino Blanco explican que les hablaba de temas que "no eran en absoluto para niños" de entre 10 y 14 años cuando les dio clase, "sexo, masturbación, homosexualidad, y sobre todo estaba obsesionado con los exorcismos". "Nos decía que él había hecho exorcismos y si estábamos con él no veríamos el infierno", recuerda otro de los que fueron sus alumnos durante el curso 1992-1993. Además, todos los entrevistados han coincidido en su carácter violento explicando que llegó a romper un paraguas contra una mesa e incluso el marco de una puerta con un portazo.Una de las prácticas por las que fue denunciado por abusos en EEUU también la utilizaba en el colegio salmantino: invitaba a los alumnos a ir "el fin de semana a su casa a hacer talleres", según explica una exalumna a 'El País'. Añade que un día cuatro de ellos acudieron a la casa "a ver qué pasaba" y que cuando llegaron les "abrió la puerta un chico, y vimos varios más pasando por detrás. Preguntamos por don Paco y apareció él, muy incómodo de que estuviéramos allí de repente, nos dijo que no podía atendernos y que lo organizaríamos para otro día". Varias vecinas de la calle Pinzones, donde residía Carrerras, han confirmado que "vivía con dos chicos" adolescentes y que incluso él mismo decía en sus clases que vivía con menores.Once detenidos, entre ellos una menor, balance delictivo del Fin de Año UniversitarioLos extranjeros, "salvación" para una provincia con pocos nacimientos y mucha emigraciónSorprendente asalto a un mesón de la plaza de Burgos, en Capuchinos

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