6 trucos caseros para eliminar el sarro de tus dientes

El sarro es placa bacteriana endurecida sobre el diente. La placa bacteriana es una película transparente que se forma en las piezas dentales a la que se adhieren las bacterias de la boca. Estas proceden fundamentalmente de los alimentos y bebidas que ingieres, así como de tu propia saliva.

Las razones por las que aparece el sarro en nuestra dentadura son diversas, aunque la principal y más común es tener una mala higiene. Además de esto, puede ser una mordida inadecuada, la mala posición de las piezas dentales o algunos alimentos con pH alto. Si quieres eliminar ese desagradable amarillo en los dientes y no quieres ir al dentista, te dejamos 6 trucos caseros para que los lleves a cabo si se da la situación.

Si hablamos de trucos caseros para casi cualquier uso, el bicarbonato aparece siempre. Las propiedades de este químico hace que sea un gran producto de limpieza ya sea para los azulejos de tu baño o incluso para tu boca. Hay que tener cuidado en su utilización ya que puede causarnos algunos problemas no deseados, pero su uso sería el siguiente: hay que mezclar una cucharada de bicarbonato y una cucharadita de sal para después humedecer un cepillo y aplicarle la mezcla. Tras esto hay que cepillarse como lo hacemos normalmente en las zonas con más sarro.

Al igual que el bicarbonato, el limón siempre es útil cuando hablamos de esos trucos caseros. Este alimento es un gran blanqueador dental además de tener propiedades antibacterianas para quitar el sarro. Al igual que el bicarbonato, puede ocasionarnos algún problema así que solo podremos utilizar este truco una vez por semana. El proceso a llevar a cabo es: llenar media taza con agua tibia y añadirle el jugo de medio limón, para después remover la mezcla y enjuagarnos la boca con ella.

Aunque parezca mentira, el agua oxigenada puede ser una gran medida contra el sarro. En conjunción con agua tibia en mezcla, podremos enjuagarnos con esto hasta tres veces por semana para eliminar el sarro.

Las semillas de sésamo son ideales para desprender la suciedad acumulada de los dientes. Tan solo tendremos que masticarlas durante unos minutos para que estas contribuyan a eliminar el sarro. Posteriormente con un cepillo masajearemos las piezas dentales para acabar enjuagándonos con agua.

Para hacer que esta especia nos ayude, hay que picar bien las hojas de un puñado de perejil y mezclarlo con una cucharada de agua hasta que se forme una pasta. A continuación, colócala sobre los dientes y deja actuar unos cinco minutos antes de enjuagar con agua.

Algunas piezas de fruta como la manzana, el melón y las fresas son alimentos fundamentales para tener las encías sanas, evitar la acumulación de alimentos y prevenir el sangrado durante el cepillado. Ingerirlas ayudará a nuestra dentadura y hará que este en las mejores condiciones.

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