La actividad cotidiana que ayuda a rejuvenecer tu cerebro

Ejercitar el cuerpo de forma habitual es indispensable para mantener una forma física activa. Además, también produce efectos muy positivos en lo que se refiere al ámbito mental.

Uno de los últimos estudios sobre la actividad física realizados en la Universidad de Georgia, en Estados Unidos, ha demostrado con sus resultados que hacer ejercicio, sin necesidad de que sea intensivo, protegen ciertas cualidades neuronales que se deterioran por el envejecimiento, como las capacidades cognitivas. Es la primera investigación que analiza la interacción del ejercicio con las redes neuronales y que influencian en el funcionamiento del cerebro.

La autora del estudio puntualiza que no es una cuestión de hacer todo el ejercicio físico posible, sino de realizar un incremento regular en los ejercicios que se realizan, sobre todo en la gente con una edad avanzada y así mantener su dependencia una mayor cantidad de tiempo.

Para realizar dicho análisis, se recogieron datos de 51 usuarios, todos pertenecientes a una edad avanzada, con diferentes estados y hábitos físicos. Se observó como respondían sus cerebros a diferentes pruebas que incluían pruebas cognitivas y resonancias magnéticas. Seguían su actividad física mediante un dispositivo que medía el número de pasos y la distancia recorrida. Además, dichos usuarios fueron sometidos a una prueba de marcha, en la que debían caminar a la mayor velocidad posible y la distancia más grande a contrarreloj.

Estos hábitos saludables se verán reflejados en el funcionamiento de las redes neuronales, que son primordiales para mantener la memoria y disponer de autocontrol. Por ello es bueno trabajar en ellas durante el envejecimiento.

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