Hacienda asume las obras en la casa dañada por el derrumbe de la Muralla

Casi cinco meses después de que más de 100 kilos de piedras de la Cerca Vieja se desplomasen de madrugada sobre la zona trasera del inmueble destrozando parte de un techo de éste, el Estado, como titular de la fortificación, ha adjudicado, a través de un contrato menor, los trabajos de reparación en este domicilio particular. Según explican fuentes de la Subdelegación del Gobierno, las obras tendrán una duración de dos meses y se limitarán a arreglar los daños que el personal técnico del Ministerio atribuye al derrumbe que se derivó del deficiente estado de conservación de este tramo de la Muralla.

Los propios bomberos que acudieron en la madrugada del 17 de noviembre a atender las llamadas de los vecinos señalaron tras revisar este tramo del Bien de Interés Cultural que se encontraba en mal estado y se soltaban fácilmente fragmentos del histórico muro sobre el que se levanta el mirador de los jardines de la Merced.

Las arcas estatales han destinado en los últimos diecisiete años 352.000 euros a reparaciones en el tramo de Cerca donde se produjo el desprendimiento, a los que se sumarían los más de 25.000 para cubrir los daños por este último incidente. Fue en 2005 cuando el pavimento de los jardines de la Merced se hundió dejando un socavón con el que dejó al descubierto una estancia subterránea. Cuatro años permaneció cerrado este espacio verde hasta que se acometió una completa rehabilitación del lienzo de la Cerca, que se sometió a otra pequeña intervención en 2015. Esas intervenciones no impidieron que el pasado otoño se volviese a producir un desprendimiento.

No es este el único desprendimiento en el entorno de la Muralla registrado en los últimos meses. En el pasado puente de la Constitución se vino abajo parte de un edificio abandonado del Seminario de Carvajal, en la confluencia de San Pablo con Rector Esperabé. Parte de las labores de desescombro se han realizado ya, pero, antes de concluirlos, el Ayuntamiento debe acometer una intervención en la zona de la Torre del Marqués de Villena —recinto de la Cueva de Salamanca— que se vio afectada.