Cientos de inmigrantes no legales, tirados en Fuentes de Oñoro por el cierre de la frontera

El estricto control impuesto tanto por la Policía Nacional como por la Guardia Nacional Republicana de Portugal debido al cierre de la frontera de España con el país vecino está sacando a la luz a centenares de inmigrantes no legales, ya sea por falta de documentación o por no cumplir al menos una de las causas justificadas para atravesar La Raya.

Cada vehículo que pretende cruzar estos días el paso fronterizo de Fuentes de Oñoro-Vilar Formoso —único abierto al tráfico rodado y peatonal de los nueve existentes en la provincia de Salamanca— es revisado por los controles policiales de ambos países, impidiendo la entrada o salida de España a aquellas personas que no lleven la documentación al día o no cumplan una de las causas justificadas para este tipo de desplazamientos.

Desde que se decretó el pasado mes de febrero el segundo cierre de fronteras entre España y Portugal, con motivo de la pandemia del coronavirus, cada día son alrededor de una decena las personas a las que se les impide continuar su viaje por incumplir las medidas impuestas por los dos estados.

Aunque la gran mayoría de los vehículos y de las personas que transportan cumplen las normas y pueden continuar su viaje, estos controles fronterizos están sacando a la luz numerosos casos en los que no se cumplen las normas fronterizas, especialmente en los autobuses de gran recorrido, utilizados tanto por nacionales de España y Portugal como por numerosos inmigrantes procedentes de países tan alejados como Pakistán o India, entre otros muchos.

Una vez detectado un viajero indocumentado o sin causa justificada, la Policía Nacional procede a devolverlo al lado portugués de La Raya —en el caso de que intentara entrar en España— o a iniciar los trámites de imposición de sanción por incumplimiento de las normas de extranjería en el caso de que se dirigiera a Portugal.

• Temas
• Fuentes de Oñoro
• Salamanca (Provincia)