Carrera contra el reloj de los pueblos para contratar las fiestas veraniegas

La mejoría en la pandemia de la covid-19 y el aumento en el ritmo de vacunación están siendo esperanzadoras a la hora de ir retomando las actividades culturales y festivas en los pueblos de la provincia salmantina. Algunos ayuntamientos han empezado ya a contratar espectáculos de cara al verano, principalmente para las semanas culturales y celebraciones patronales, lo que está dando cierto respiro a las agencias de espectáculos tras un largo parón de fatales consecuencias económicas.

“A día de hoy no todos los ayuntamientos están por la labor de organizar fiestas o algún tipo de evento cultural por miedo y por los estrictos protocolos a cumplir. Una verbena no se puede concebir con público sentado. Mientras tanto hemos reinventado todos nuestros productos para cumplir con los protocolos y que sean atractivos para ayuntamientos y espectadores, como pueden ser espectáculos musicales de distintos formatos, variedad de tributos, solistas, cine de verano, actuaciones de magia, animaciones infantiles y otras”, explica David Rodríguez, gerente de Espectáculos HC, propietario de la orquesta Amazonas y Disco Galaxy y socio de Universal Eventos.

Carlos de la Calle, presidente de la asociación Acople, explica por su parte que “la gente aún tiene mucho miedo pero sí se está animando más el porcentaje de pueblos que están intentando reactivar las actividades y hacer algo que a los vecinos les permita desconectar un poco, aunque sea de forma limitada y con determinados protocolos”. Carlos de la Calle asegura, además, que “antes se contrataba con mucha antelación y ahora casi es de un día para otro porque van cambiando las normas y ahora esperan a ver qué se va a poder hacer y qué no”. El presidente de Acople hace hincapié, por último, en que el mundo del espectáculo “se ha tenido que reiventar para trabajar aunque sea mínimamente, aportando innovación y creatividad para poder sobrevivir”.

David Rodríguez, de Universal Eventos, reconoce también que la covid ha tenido graves consecuencias económicas para las agencias de espectáculos. “En cuanto a la facturación la caída la estimó en un 80 por ciento fácilmente por las pocas corporaciones que desean realizar fiestas o eventos culturales. El presupuesto que destinan ahora no es el del año 2019, el último antes de la pandemia, aunque esperamos trabajar el 2022 con total normalidad”, comenta.

Numerosos pueblos, a día de hoy, siguen pendientes de las nuevas directrices que marque la Junta de Castilla y León de cara al verano ya que la inmensa mayoría celebran sus fiestas y semanas culturales en agosto, mes vacacional por excelencia, y en el que los municipios reciben a un buen número de hijos ausentes y visitantes.

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