La voluntad de Michu respecto a su hija que afecta directamente a José Ortega Cano
Antes de fallecer, la joven madre habría dejado por escrito su deseo de que su hija Rocío, de 7 años, quedara bajo el cuidado del torero, exsuegro y abuelo paterno, en caso de que algo le ocurriera
E. P.
Madrid
Miércoles, 9 de julio 2025, 10:25
La repentina muerte de Michu, madre de Rocío —hija que tuvo con José Fernando Ortega—, ha sacudido a su entorno más cercano y ha puesto en el centro a José Ortega Cano. La joven falleció el lunes por la noche en su domicilio de Arcos de la Frontera (Cádiz) a los 33 años tras sufrir un fallo cardíaco. Estaba sola con su hija de 7 años, que fue quien salió a pedir ayuda a los vecinos. Cuando los servicios de emergencia llegaron, ya no pudieron reanimarla.
Más allá del impacto emocional, la tragedia ha destapado una voluntad que Michu habría expresado claramente en vida y que ahora cobra especial relevancia: su deseo de que, si ella faltaba, su hija quedara al cuidado de su abuelo paterno, José Ortega Cano. Así lo han revelado los periodistas Kike Calleja y Leticia Requejo en televisión, asegurando que la joven, consciente de su frágil estado de salud, había comunicado esta decisión a su entorno familiar e incluso la habría dejado por escrito.
Este deseo podría tener un impacto directo en la vida del torero, quien mantiene una relación muy cercana con la pequeña. Tanto él como su hija Gloria Camila —tía de Rocío— han mostrado siempre un gran cariño por la menor, a la que llaman cariñosamente «miniyo» por el gran parecido físico entre ambas.
Sin embargo, el futuro de la niña no está del todo claro. José Fernando, su padre, permanece legalmente incapacitado y reside en un centro psiquiátrico desde 2017. Además, algunos apuntan a que, dada la situación traumática, cambiar a Rocío de entorno —de ciudad, de vida y de rutina— podría ser demasiado brusco. Aunque se ha hablado de una relación complicada entre Michu y sus propios padres, no se descarta que ellos también reclamen la tutela de su nieta.
Por el momento, Ortega Cano no ha querido pronunciarse sobre la posibilidad de asumir legalmente el cuidado de Rocío, limitándose a asegurar que lo único que le importa ahora es el bienestar de la niña. Una niña que, tras perder a su madre de forma repentina, podría tener por delante otro gran cambio en su corta vida.