La cuantiosa multa de la DGT por circular con los cristales congelados

Durante los meses de invierno, es común encontrar nuestro automóvil cubierto de nieve o hielo por las mañanas. Aunque tengamos prisa, es importante dedicar unos minutos para descongelar las ventanas antes de arrancar.

Además de poner en riesgo nuestra seguridad al disminuir la visibilidad del conductor, podemos recibir una multa que varía entre 80 y 200 euros, dependiendo de la gravedad. Las razones por las que podemos ser sancionados incluyen: tener parabrisas o ventanas dañados o rotos que dificulten la visibilidad, tener una capa de hielo o suciedad que obstaculicen la visibilidad, usar láminas, adhesivos u otros elementos que dificulten la visibilidad, y tener un soporte para el móvil o GPS que obstruya la visibilidad. Las sanciones se interpondrán en el rango mencionado anteriormente, según la gravedad de la rotura o suciedad. Sin embargo, si los daños son extremadamente notables, las autoridades pueden inmovilizar nuestro automóvil considerándolo un peligro para la seguridad en la carretera.

Además, aunque los cristales estén en perfecto estado, es importante tener en cuenta que el tintado de las ventanas debe ser homologado en las estaciones de ITV y, de no pasar la prueba, nos costará una sanción de 200 euros. Asimismo, no tener las escobillas del limpiaparabrisas en buenas condiciones nos costará 80 euros de multa.