Aplazan un juicio en Salamanca por la ira del acusado: “Me ha preguntado 14 veces lo mismo...”
Su letrada advirtió desde el inicio que estaba medicado y le costaría declarar | Una ambulancia se lo llevó de la vista tras el dictamen del forense que acreditó su gravedad : “Está desorientado en tiempo y espacio”, informó a la Audiencia | La fiscal le pedía 4 años de cárcel por una estafa
Miércoles, 18 de diciembre 2019, 15:00
El juicio que este miércoles se iba a celebrar en la Audiencia Provincial de Salamanca contra un matrimonio por una estafa de más de 90.000 euros a una empresa de embutidos de la zona de Guijuelo mediante el tradicional ‘timo del nazareno’ tuvo que suspenderse al poco de comenzar debido a la situación del varón acusado, P.L.T., que medicado -tal y como advirtió su letrada al tribunal desde el inicio de la sesión-, comenzó a alterarse durante el interrogatorio de la fiscal hasta llegar a encararse a ella y continuar increpando al querellante: “No me puede preguntar catorce veces la misma cosa. Yo no le he hecho nada a este hombre... ya está bien, ya está bien”, espetó a la fiscal totalmente fuera de sí.
El acusado, que junto a su mujer, declaraba a través de videoconferencia desde los Juzgados de Illescas (Toledo), comenzó entonces con una retahíla de improperios que provocaron que su esposa -que estaba sentada junto a él- se levantara y se pusiera de pie, tras lo que lo abrazó para intentar calmarlo y al igual que hizo su hijo -que esperaba fuera de la sala para declarar como testigo- a los pocos segundos.
Tanto en los Juzgados de Illescas como en la Sala de la Audiencia Provincial de Salamanca se vivieron momentos de tensión, ante el estado del acusado que entró en cólera con la evidencia de que no se encontraba en condiciones de declarar. A tal punto llegó al situación que se hizo necesaria la presencia de personal sanitario y el tribunal tuvo que urgir la asistencia del médico forense para ver si podía continuar con la declaración.
Tras un receso aproximado de tres cuartos de hora, el forense -que se trasladó desde Toledo capital hasta Illescas para explorar al acusado- informó al tribunal: “está desorientado en tiempo y espacio... está grave”, manifestó acreditando que en modo alguno se encontraba en condiciones de seguir declarando.
La Audiencia Provincial suspendió acto seguido el juicio, que quedó aplazado sin fecha en función de la evolución del acusado.
La Fiscalía pide para el varón P.L.T. y para su mujer C.L.Z. cuatro años de prisión y 5.400 euros de multa además de la indemnización correspondiente por el importe presuntamente estafado.
Los hechos de los que se les acusa tuvieron lugar en el año 2015, cuando supuestamente entablaron tratos con un empresario de la zona de Guijuelo y tras realizar diversas compras de embutidos, comenzaron a emitir pagarés que no pudieron ser cobrados.
En total, según el Ministerio Fiscal, se apoderaron de mercancía por un importe que supera los 90.000 euros.