Sin solución en Renfe: Trenes con reservas completas y asientos vacíos
El Gobierno no resuelve el problema de los “viajeros fantasma” que reservan plazas de MD y Alvia que no utilizan
El caos continúa a bordo de los trenes que conectan Salamanca y Madrid por la falta de control en el uso de los abonos gratuitos que el Gobierno de España ofrece desde el pasado 1 de septiembre tanto para los Media Distancia como para los Alvia de Salamanca por contar con un ilimitado número de asientos Avant. Muchos usuarios frecuentes que viajan a diario en ellos no pueden sacar sus billetes porque en la aplicación y en la web aparecen todos los asientos reservados, pero en realidad sí disponen de plazas libres —en algunos casos, vagones casi vacíos—.
Todo ello porque ni el Ministerio de Transportes ni la compañía ferroviaria han querido poner freno por ahora a la picaresca de muchos usuarios que reservan numerosas plazas que luego no usan. Algunos recurren a esta treta para alcanzar el mínimo de 16 viajes solicitados por Renfe y recuperar así la fianza de 20 euros que hay que depositar para sacar el abono. Y otros, porque, dado que van a “pagar” lo mismo, reservan en varias fechas u horarios para un viaje que aún no han decidido cuándo harán.
El Gobierno no pone solución ante estos “viajeros fantasma” que realizan un uso insolidario de los abonos gratuito. Quien actúa de esta forma no es penalizado de ninguna forma por parte de Renfe, que se limita a cumplir las indicaciones del Ministerio que dirige Raquel Sánchez.
La única medida que pone la red nacional es limitar a cuatro las reservas por día: dos de ida y dos de vuelta, pero “eso no acaba con el problema”, coinciden los viajeros. No hay límite para reservar en diferentes días o todos los fines de semana hasta Navidad y posteriormente decidir en cuál de ellos se hará el viaje. Esto lleva a que los usuarios habituales, señala el portavoz de la plataforma de viajeros de Alvia en Salamanca, Alejandro Rosende, tengan que reservar con casi un mes de antelación para poder ir y venir a Madrid.
La única medida adoptada para resolver esta situación es la llamada de atención que Renfe hace con anuncios en sus trenes en los que pide a los viajeros que hagan un consumo responsable y anulen las plazas que no vayan a utilizar. Sin embargo, no hay control ni posterior penalización a quienes de forma reiterada reservan plazas que no usan.
Como ha comprobado este periódico, los usuarios de estos servicios ferroviarios se quejan en los andenes de Vialia de este mal uso que afecta a todos y tachan de “insolidaria” la acción de las personas que reservan un asiento para luego no presentarse porque “podrían ser ocupados por alguien que realmente necesite viajar”.
“Me ha llamado la atención que Renfe coloque mensajes informativos en los asientos para realizar un uso responsable de los abonos, pero eso no es solución porque los usuarios siguen sin anular sus plazas”, lamenta la viajera Ana Fernández que realiza el recorrido a diario de Salamanca-Madrid.
La pasajera Francesca Gherardi también se muestra indignada por la situación. “Cuando algo es gratis la gente actúa de forma negativa sin tener empatía ni pensar que quitan un sitio a los demás”, detalla.