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Con el fin de reforzar las zonas en las que más se multa por exceso de velocidad y para garantizar la seguridad vialy de los peatones en las carreteras Salamanca, el Ayuntamiento pretende instalar seis nuevos radares didácticos y cinco peatones inteligentes, tal y como aseguran fuentes municipales, que se unirán a los 12 ya existentes en la ciudad: en la carretera de Aldealengua con calle Hortelanos, paseo de la Estación con calle Elcano, avenida Alfonso IX de León (junto al Colegio Santa Teresa), avenida Alfonso IX de León con plaza de Madrid, carretera de Ledesma junto a calle Relojeros, carretera de Ledesma con calle Guijuelo, calle Babia con calle del Bachiller Sansón Carrasco, calle Mayor de Chamberí con calle de Núñez Losada, avenida José Núñez Larraz junto al puente del VIII Centenario, puente Sánchez Fabrés (en dirección salida de la ciudad), puente de Felipe VI (en dirección entrada de la ciudad) y calle Buenaventura con calle San Damián.
Estos radares pedagógicos para reforzar la seguridad y concienciar a residentes y turistas sobre los límites de velocidad en todas y cada una de sus zonas están destinados también a persuadir a los conductores para que reduzcan la velocidad en diferentes tramos de la ciudad y que regresen a los límites establecidos por el Consistorio, no multan, pero sí que sirven a todas las personas que van al volante para reducir la velocidad y ser conscientes de que la velocidad a la que circulan está por encima de la permitida. Para emitir los avisos, estos aparatos didácticos emiten luces de distintos colores según la velocidad a la que se está circulando.
De esta forma, si el dispositivo emite una luz roja y advierte con la palabra 'Peligro', da a entender al conductor que ha de reducir la velocidad cuanto antes para evitar cualquier tipo de siniestro. En cambio, si se ilumina de color verde y emite un mensaje de agradecimiento, significa que la velocidad a la que se está circulando es la adecuada y la permitida en la vía. Estos dispositivos cuentan con un rango de aviso de entre 200 y 300 metros con tecnología Doppler y suelen provocar que los conductores reduzcan un 28% la velocidad en el momento en el que los visualizan. El primer paso que el Consistorio dio para asegurar la buena circulación y la reducción de velocidad se dio hace cuatro años, cuando se instaló el radar didáctico piloto en la calle Manuel Ramos Andrade.
La comisión de Bienes y Contratación prevé aprobar el nuevo contrato de señalización horizontal y vertical de la ciudad, un suministro valorado en 5.032.934, 98 euros para los tres próximos años y prorrogable anualmente por otros dos. Al concurso se han presentado seis empresas aspirantes, pero el dictamen ha acordado la adjudicación del contrato a la empresa Aceinsa Movilidad, S.A., por ser la oferta que ha obtenido la puntuación más alta. En la misma ha prometido un 17% de rebaja sobre el precio de licitación y una serie de mejoras: el suministro de seis radares pedagógicos y cinco peatones luminosos con detector de presencia de peatón.
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