Plazas médicas de las zonas rurales se moverán a la capital y el alfoz

La Gerencia Regional de Salud ha retomado el plan de reordenación de la sanidad rural, que era el gran objetivo con el que llegaron Verónica Casado y Manuel Mitadiel a la Consejería, pero que se paralizó en 2020, justo cuando ya se estaba probando en Aliste.

Este plan se fundamenta en varias certezas: la principal es que la Atención Primaria de Castilla y León no está bien organizada porque hay médicos que tienen cupos de 200 pacientes y otros de casi 2.000. “Nunca hemos dejado de trabajar en este plan porque el 60% de los recursos están atendiendo a solo el 40% de la población”, aseguró Verónica Casado.

Es decir, hay pocos médicos y están mal distribuidos, por lo que urge volver a repartir el trabajo entre todos los profesionales de Sacyl.

La teoría está lista y la práctica va a empezar a aplicarse en los próximos meses: “Ya hemos finalizado los estudios para modificar el mapa sanitario de zonas básicas de salud y redistribuir su población entre los profesionales. La primera fase está acabada después de que cada área de salud haya estudiado las necesidades de modificación, las vacantes y las que se van a producir”, explicó Casado.

Cada provincia ha puesto sobre la mesa de la Consejería un informe de qué puestos están saturados, cuáles pueden asumir más trabajo y qué jubilaciones se esperan a corto plazo.

Con estas cifras se va a actuar lo antes posible y después se promete una “valoración anual de los cupos de pacientes para mejorar la distribución, garantizando que no se excedan los cupos máximos ni mínimos, lo que permite mantener la competencia de los profesionales”.

La fórmula que seguirá Sacyl será la de crear más plazas de médicos en las zonas más saturadas -capital y alfoz- y amortizarlas de las zonas con menos habitantes. A su vez, en estas áreas rurales se crearán infraestructuras intermedias entre el centro de salud y el consultorio.

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