Las claves para ahorrar en la cesta de la compra de cara a Navidad
Muchas familias hacen cábalas para que la cena de Nochebuena y la comida de Navidad no sea tan cara. Buscan otros pescados como la corvina o el rodaballo, y sustituyen el solomillo de ternera por otras carnes menos costosas

Es el gran quebradero de cabeza que estos días tienen muchas familias salmantinas: ¿Qué hago para abaratar el menú de Nochebuena y Navidad?”.
En muchas ocasiones los platos se repiten año tras año y es difícil cambiarlos, pero los hogares que no son tan metódicos sí tienen opciones imaginativas que permiten aliviar en buena medida la cartera. De esto se habla estos días en los mercados y en las tiendas de la ciudad.
EMBUTIDOS
Sustituir los embutidos ibéricos de bellota que siempre suponen un gran desembolso económico no parece muy difícil. Jamón y lomo se venden ahora sobre los 48 euros, el salchichón a 23 y el chorizo a 20. Si se baja el escalón de la calidad al ibérico de cebo la factura se reduce prácticamente a la mitad. El queso, según explican en los puestos de carnicería puede ser sustituido por patés caseros que cada vez ganan más adeptos y que resulta más económico.
PESCADERÍA
En cuanto al marisco y al pescado, algunas de las personas consultadas por este diario mientras hacían la compra explicaban que es el momento de aprovechar aquellos productos que no habían incrementado su precio. El besugo supera cada año por estas fechas los 50 euros, y la lubina salvaje y la merluza del cantábrico los 20. La corvina, que está a 10 euros el kilo, o el rodaballo, que se puede adquirir a 14, son pescados sabrosos con los que “sorprender a buen precio”, según indican los propios dependientes de las pescaderías.
Encontrar un sustituto al marisco es más complicado, aunque el pulpo del sur puede ser una gran opción porque puede encontrarse desde 15 euros. La calidad no es la misma que el gallego, pero el precio es tres veces inferior. Mejillones y almejas pueden ser un complemento ideal si se pretende reducir la factura final.
CARNICERÍA
En cuanto a la carne, si las familias optan por un asado, cabrito, tostón y cordero pueden sustituirse por un codillo de cerdo que sonda los cinco euros el kilo, lo que supone un ahorrar muy significativo. Si en lugar del solomillo de ternera se compra un entrecot el precio de la ración se reduce a la mitad, y existen opciones como el pollo de corral, a 9 euros, el rabo de toro a 10 y las carrilleras a 9,5 que si se tiene tiempo para guisar resultan muy apetecibles, tal y como explican los propios carniceros.
A la hora de comprar vino, en las tiendas especializadas han notado como el presupuesto sí ha descendido. El tinto de Ribera de Duero sigue siendo el preferido por las familias salmantinas, aunque cada vez son más los que optan por caldos de Toro o de la Sierra de Salamanca. El blanco se va haciendo sitio, y según señalan los dependientes cada vez es más vendido y existen opciones “de gran calidad-precio”.
Las familias salmantinas confían en que esta receta del ahorro les salga tan bien como la que hacen delante de los fogones.
FRUTERÍA
Una ensalada para acompañar a la carne o el pescado en lugar de embutidos o entremeses pueden hacer el menú más digestivo y más barato. La escarola se puede comprar a 1,50 euros la unidad y la granada por menos de cinco euros el kilo en las fruterías salmantinas.