1,7 M€ para 'destapar' más misterios de la Edad de Hierro y restos napoleónicos del Cerro de San Vicente

Al Cerro de San Vicente le quedan aún muchos secretos por desvelar sobre el origen de Salamanca y sobre el periodo napoleónico. Pero, al menos parte de ellos no tardarán en revelarse a través de un nuevo proyecto de más de 1,7 millones de euros y que la pasada semana recibió el primer visto bueno de la Comisión Territorial de Patrimonio, que, eso sí, ha requerido algunos cambios. Esta actuación, incluida dentro del plan director del Cerro y para la que se recibieron fondos del Ministerio de Turismo, se desarrollará en la plataforma superior, en la «cumbre» de la colina, y permitirá contemplar restos arqueológicos de la Edad de Hierro y de la Guerra de la Independencia que, aunque fueron descubiertos en las excavaciones realizadas en 2017 y años posteriores, tuvieron que volver a cubrirse para garantizar su protección. Además de exhumar estos, se construirá un entramado de sendas, paseos elevados sobre el terreno y zonas ajardinadas que permitan acceder a los diferentes «estratos de la historia» que serán desenterrados en esta colina. Por otra parte, se pondrán las bases de una futura cafetería que se culminará en una fase de obras posterior. Todo ello, con el objetivo de que el Parque Arqueológico de San Vicente deje de ser un espacio para visitas guiadas puntuales y se convierta en un foco de atracción turística constante de la ciudad.

Dentro del proyecto se incluyen tres intervenciones arqueológicas que implican destapar restos ya localizados pero que permanecen ocultos. Se exhumarán las baterías militares francesas, las trincheras, construidas a principios del siglo XIX durante el uso del monasterio de San Vicente como fuerte militar, así como un posible polvorín y varias posiciones de tiro. También se sacarán a la luz los restos hallados durante la búsqueda de la casa de recreo del monasterio benedictino a finales del siglo XVI. Quizá la actuación más relevante será desenterrar la vivienda protohistórica de planta circular, así como dos estructuras auxiliares y retazos de un edificio rectangular datados en los siglos VII-VI antes de Cristo, actualmente tapados con una capa de tela geotextil y localizados en la zanja que quedo tras el derribo en 2005 del colegio mayor de Nuestra Señora de Guadalupe. Sobre estas estructuras de adobe del antiguo poblado de la Edad de Hierro, que fueron localizadas en la excavación de 2018, el proyecto plantea la principal actuación constructiva. Se trataría de una estructura por módulos que proteja los restos ya localizados así como otros que podrían encontrarse en áreas cercanas, pero que también cuente con rampas y plataformas desde las que el visitante puedan observarlos sin dañarlos, y que permita el trabajo simultáneo de los especialistas en las excavaciones. Para la cimentación de esta estructura, se aprovecharán los muros del antiguo colegio mayor construido a mediados del siglo pasado.

Muchos salmantinos y turistas han accedido ya a la estructura construida hace dos décadas en el Cerro para proteger las casas de adobe de la Edad de Hierro ya visitables. Sin embargo, en una de las últimas excavaciones realizada en 2022 se sacaron a la luz nuevos hallazgos, como una construcción rectangular de planta similar a los antiguos templos y otras de carácter cuadrado, parte de los cuáles sobresale del edificio levantado para proteger los restos. Por ello, esta infraestructura será ampliada con materiales similares.

Además de un viaje al pasado de la capital del Tormes, desde su cuna hasta la Guerra de la Independencia, el Cerro constituye un espléndido mirador hacia el Tormes y la Ciudad Vieja. Por ello, está proyectado un sendero que hace un recorrido perimetral por toda la cornisa, así como otros caminos con mobiliario urbano que vertebren y comuniquen los diferentes restos con el acceso al edificio principal, donde se encontrará la exposición «Salamanca invisible».

Nuevos paneles explicativos

Además de bancos, papeleras y luminarias, en la parte alta del Cerro de San Vicente se instalarán diferentes paneles informativos para explicar a los visitantes los restos arqueológicos de la Edad de Hierro; de los restos conventuales tanto del monasterio como de su entorno y los huertos; de los restos napoleónicos vinculados a la batalla de Salamanca; de los hábitats naturales de la ribera y la dehesa, y de la Vía de la Plata.

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