La sorprendente iniciativa en contra de una mina de un pueblo salmantino

Es por esto que, aunque cuentan con apoyos (uno de los últimos en sumarse a la lucha contra esta mina fue precisamente Armenteros), Chagarcía Medianero está al frente de lo que, según palabras del alcalde del municipio, Juan Ignacio Sánchez, «es la guerra». Uno de los últimos movimientos del Consistorio para intentar poner freno a la actividad en la mina ha sido la aprobación de una ordenanza por la cual «no podrán circular por los caminos municipales camiones de más de 12 toneladas de peso», explica el regidor. Aunque esto no garantiza el fin de la actividad minera, Sánchez explica que «sí puede afectarles, puesto que sabemos que los camiones que están utilizando en la actualidad pesan 16 toneladas vacíos y cuando salen de la explotación tienen un peso de 40 toneladas; que hagan lo que tengan que hacer, pero deberán poner fin a eso».

El regidor lideró precisamente una ruta programada para manifestarse una vez más contra la mina. Más de medio centenar de personas se dieron cita para realizar un recorrido que rodeaba la explotación hasta llegar al municipio de Carpio Medianero. Durante el recorrido, residentes, integrantes del Consistorio y ganaderos de la zona pudieron visualizar el estado actual de la explotación y al término del recorrido, el propio Juan Ignacio Sánchez leyó un manifiesto. «Aunque sabemos que cumplen con el reglamento y no podemos frenar la actividad, sí que vamos a hacer todo lo posible para entorpecerla e indicarles que tienen la puerta abierta para irse», afirmó el máximo mandatario consistorial.

Las voladuras son la principal preocupación de este pequeño municipio. La primera de ellas se produjo el pasado mes de marzo sin previo aviso y sorprendió a los vecinos. «Tememos que las explosiones afecten al pueblo y ganado de la zona», sentenció el regidor.