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En Cantalpino ya pueden beber agua del grifo con tranquilidad desde hace unos días, momento en el que la red de abastecimiento municipal recobró los niveles de potabilidad permitidos al reducirse el nivel de nitratos por debajo de los 50 microgramos.
«La muestra analizada cumple los límites marcados por la legislación vigente y los criterios internos definidos por los parámetros analizados», daba a conocer el informe de ensayo emitido por el laboratorio Aquimisa. El resultado de la muestra tomada el 10 de abril en el depósito del agua daba a conocer una presencia de 37, 8 microgramos de nitratos por litro de agua.
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Jorge Holguera Illera
En la localidad hay quienes respiran más aliviados al saber que el agua está en mejor estado, otros, sin embargo, siguen sin fiarse. Las opiniones entre los vecinos de Cantalpino son muy variadas.
Un vecino confiesa que él siempre bebió del grifo y «aquí estoy», presume. Dice que no se ha sentido mal por el tema del agua. Desde el propio Ayuntamiento han trabajando incansablemente por dar una solución, no obstante estaban tranquilos porque sabían que los niveles de nitratos ahora, y de metolacloro antes, no eran excesivamente peligrosos, más que nada porque saben que en otros tiempos no hubieran sobrepasado los límites establecidos. Recordaban que hace tiempo los límites eran otros.
«Ahora se puede beber agua pero no nos fiamos, pensamos que en cuanto se hagan los tratamientos del campo se filtrarán los productos y volveremos a tener el problema», confiesa otro vecino.
El alcalde, Manuel Antonio Hierro, tampoco está tranquilo y sigue trabajando. «Ya se puede beber y seguimos planteándonos soluciones porque sabemos que cuando empiece a filtrarse el herbicida volveremos a tener el mismo problema», dice el regidor.
Al mismo tiempo un vecino de Cantalpino subraya el gasto que suponía en su hogar comprar agua embotellada, desde una de las tiendas locales dicen que siguen teniendo demanda. En la localidad se sigue consumiendo agua de botella. «Nosotros para beber de botella y para cocinar usamos la del grifo», declara una mujer, a la vez que recuerda que en esta localidad ya han vivido otros episodios similares al de este año.
Cabe recordar que Cantalpino ha estado casi 11 meses sin agua potable en la red municipal. El 18 de mayo de 2023 el Ayuntamiento dio a conocer mediante un anuncio público la presencia de metolacloro en el agua de abastecimiento y declaró no ser apta para el consumo. Desde entonces se sucedieron los intentos del Consistorio para restablecer la normalidad. El 19 de octubre llegó el negativo, al obtener 0,025 de presencia de metolacloro porque está permitido por debajo de 0,03. No obstante los análisis dieron positivo en nitratos al arrojar resultado de 63, cuando el máximo permitido es 50. Ahora ya el agua es potable y se espera que dure mucho.
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