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Viernes, 29 de noviembre 2024, 11:04
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Tal y como avanzó LA GACETA el pasado lunes, el concejal socialista José Luis Rodríguez Celador vertió descalificaciones e insultos hacia el alcalde, Luis Francisco Martín, tales como «payaso de los coj..., personajillo, déspota, pájaro bobo y dictador».
La situación tensa entre ambos comenzó el pasado martes, 19 de noviembre, en el pleno extraordinario celebrado en el Ayuntamiento para hablar únicamente de La Covatilla. En ese pleno, ambos también intercambiaron insultos como «rata» y «enano». La tensión fue a más en el pleno celebrado este lunes cuando, en su parte final, el edil del PSOE pidió intervenir al final de la sesión por alusiones tras ser acusado por Martín de hacer preguntas «con maldad». El regidor le negó la palabra por estar en su turno de intervención cuando daba respuesta a las preguntas de la oposición. Celador interrumpió al alcalde en varias ocasiones para pedir intervenir «por alusiones» y el alcalde mantuvo la negativa a darle ese turno de palabra.
El rifirrafe entre ambos fue a más hasta el punto de que Luis Francisco Martín dio tres avisos al concejal socialista y pidió a su compañero, Javier Hernández, que llamara a los agentes de la Policía Local para que sacaran de la sesión a Celador. La tensión aumentó más aún cuando el socialista preguntó al alcalde «¿usted quién se crees?» en varias ocasiones e insistió en su derecho a intervenir ante lo que Martín afirmó que era él, como alcalde, el que marcaba el ritmo del pleno.
Rodríguez Celador se negó a salir de la sesión y el alcalde pidió a los policías que sacaran al concejal por «falta de respeto al presidente». Esta situación hizo que el resto de concejales de la oposición, a excepción del portavoz socialista Antonio Cámara, abandonaran el pleno ante la presencia de los dos agentes de policía. Los insultos de Celador siguieron con descalificaciones como «es usted un absoluto impresentable y un dictador» para añadir que «lo peor del mundo es un personajillo, que se cree un personaje, un pájaro bobo que se cree un pavo real» y, además, se oyó en la sesión a través de un micrófono abierto cómo Celador dijo «payaso de los cojones».
El alcalde de Béjar destacó ayer la necesidad de que «los representantes públicos actúen con responsabilidad y educación, siendo conscientes de que nuestras palabras y acciones tienen un impacto directo en la percepción que los ciudadanos tienen sobre sus instituciones» y, por ello, desde su cargo como alcalde, reiteró su compromiso con el respeto y la cordialidad en todas las interacciones políticas. También hizo una llamada a los grupos políticos en el Ayuntamiento de Béjar para «promover un ambiente constructivo donde prevalezca el respeto mutuo y donde las diferencias se discutan con altura». Finalmente, concluyó que los ciudadanos merecen representantes políticos con integridad y responsabilidad y mostró su esperanza en que el incidente vivido el pasado lunes en el pleno sirva como oportunidad para reflexionar sobre las conductas y para trabajar hacia un futuro con el respeto como norma.
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