El Guijuelo completa un gran partido y se impone con un jugador menos

El Municipal Luis Ramos acogía la jornada 16 en el Grupo I de la Segunda Federación, el Club Deportivo Guijuelo y la Gimnástica Torrelavega median sus fuerzas tras dos últimos encuentros dónde ambos conjuntos no encontraron la victoria. Una primera parte fría, en todos los sentidos, que acabó con la expulsión por doble amarilla del extremo chacinero Toti dejaba entrever unos segundos cuarenta y cinco minutos complicados para los de Mario Sánchez, sin embargo, para sorpresa de todos, Juan Antonio abrió el marcador en el minuto 59 poniendo el 1-0 y Alberto, en el 71, volvió a poner por delante a los chacineros tras el gol del cuadro visitante en el minuto 60. El cuadro cántabro terminaba, también, con diez jugadores por una tarjeta roja al cancerbero en los últimos diez minutos.

El balón se puso a rodar sobre el tapete del Municipal Luis Ramos bajo una espesa neblina en lo que era una fría tarde de fútbol en tierras chacineras. Como el ambiente, el partido mostró durante los primeros minutos a dos equipos bien colocados y con miedo de conceder demasiado en la zona defensiva. Tal fue así, que llegamos a los diez primeros minutos de juego sin acercamientos en ambas áreas por parte de los dos equipos. La presión alta de los visitantes no surgió efecto ante unos zagueros guijuelenses con un alto nivel de concentración, lo que hizo entrar a los jugadores en encuentro disputado donde el conjunto que tuviese mayor control del centro del campo podría ser diferencial en el devenir del partido. Basurto, jugador del conjunto cántabro, fue el primero en probar suerte con un disparo con muy mala fe. El guardameta local, Rabanillo, algo adelantado despejó el cuero a saque de esquina tras un disparo de vaselina que gracias a una gran intervención acabó en agua de borraja. A los 16 minutos de partido, Garban respondía con un remate escorado que se marcha lejos de los tres palos después del primer saque de esquina para los locales. Con el paso de los minutos, el juego seguía pasando por el control del centro del campo, sin embargo, las dos zagas muy bien posicionadas no daban opciones a los delanteros rivales. Basurto, del Torrelavega, y Toti, del Guijuelo, llegaban al minuto 30 con amarilla tras dos entradas que el colegiado vio pertinente sancionar. Entrados en los últimos minutos del primer tiempo, los intentos de acercamiento pasaban por el balón parado ya que, en ocasiones, ponía en serias complicaciones a los cancerberos. En el minuto 44, llegaría la jugada que condicionaría el resto del partido. El colegiado madrileño mostraba la segunda amarilla a Toti tras una entrada a la altura de la medular del área. Con ello, los dos equipos ponían rumbo al túnel del vestuario en una primera parte sin ocasiones y donde se impuso el buen hacer defensivo.

Los segundos cuarenta y cinco minutos se presuponían complicados para los pupilos de Mario Sánchez, y dos jugadas en los diez primeros minutos por parte del cuadro visitante confirmaban dichas palabras, pero, en el minuto 59, Juan Antonio estrenaba el luminoso en favor del Guijuelo. El delantero aprovechaba un cierto desconcierto en un saque de esquina para romper la red de la portería rival con un remate a bocajarro que hacía imposible cualquier intervención del meta rival. Para desgracia de todos los aficionados, la alegría duraría más bien poco. Un minuto más tarde, el cuadro cántabro igualaba el partido gracias al tanto de Alberto Gómez en una rápida reacción al gol del Guijuelo. Aunque sobre el verde no parecía lo mismo, los chacineros contaban con un jugador menos y llegados al minuto 71, una jugada en banda izquierda terminaba en el segundo tanto de los locales. Para sorpresa de todos, Alberto volvía a poner por delante al Guijuelo gracias a un gran golpeo desde fuera del área que acaba en el palo largo de la meta del Torrelavega. La segunda mitad diferenciaba un mayor número de ocasiones y ello, se traducía en goles en ambas porterías. En los siguientes compases, vino como el equipo cántabro buscaba el empate, pero Rabanillo, bastante seguro, terminaba con cualquier aspiración de los rivales. Y de nuevo, el colegiado sería protagonista en el encuentro entrados en los diez últimos minutos de juego. Ibra Dieng, uno de los jugadores que dio entrada Mario Sánchez, intentaba marcharse del guardameta con un balón en largo, pero, Mediavilla lo derribaba a escasos metros del área y terminaba viendo la tarjeta roja directa. Con uno menos, el cuadro chacinero no dejaba muchos huecos sobre el verde, por lo que, igualadas las fuerzas, el Torrelavega tampoco contaría con muchas oportunidades de empatar el duelo. El descuento amplió a unos nueve minutos que no supusieron ningún cambio en un luminoso cada vez menos visible por culpa de la neblina y con ello, el Club Deportivo Guijuelo se marcha al parón de Navidad sumando unos nuevos tres puntos vitales para las aspiraciones guijuelenses.