Los apicultores ven inviable la figura del veterinario de las abejas
Piden que la Administración se involucre de verdad en problemas sanitarios como la varroa
El sector apícola atraviesa una época complicada y amenaza con movilizaciones a corto plazo con el objetivo de lograr soluciones reales a los problemas que afronta. Las organizaciones profesionales agrarias, ASAJA, UPA y COAG se han reunido con el secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda y la directora general de producciones y mercados agrarios, Esperanza Orellana, donde, además de trasladar las preocupaciones de los apicultores, han sacado conclusiones en materia sanitaria con las que no están de acuerdo.
“A los problemas que atraviesa el sector apícola, como es la comercialización o la varroa, se añade el interés del Ministerio en sacar a las abejas de las especies menores para someterlas a un tratamiento sanitario como al resto de especies de ganado, como puede ser el ovino o el porcino”, manifestaba el pasado martes el presidente de COAG, José Manuel Cortés. Por este motivo, Cortés insinuó el comienzo de próximas movilizaciones de los profesionales.
De acuerdo con él, el presidente de la cooperativa apícola Reina Kilama, Santiago Canete, ve “inviable” incorporar la figura del veterinario como al resto de explotaciones: “No podemos tener un veterinario de explotación como se nos pide porque somos trashumantes, nuestras explotaciones están en diferentes partes de España”.
En este sentido, recuerda que su principal problema sanitario es la varroa, para lo cual “no hay solución”. “Lo que demandamos es que tanto laboratorios como el Ministerio saquen nuevos productos para hacer frente a este problema”, manifiesta.
De primera mano, Roberto Morato y Mónica Domínguez, naturales de Los Santos y Peromingo, respectivamente, conocen cuál es el estado del sector. Desde 2019, Morato comenzó a trabajar con colmenas en la zona de Entresierras y, desde 2020, junto a Mónica, decidió dar a conocer su negocio -de 150 panales- a través de una cuenta de Instagram.
A través de publicaciones en la red social muestran todo el proceso de elaboración de un tarro de miel con el fin de darlo a conocer y que, sus seguidores o curiosos que visiten el canal, valoren el precio final del producto viendo todo el trabajo que hay detrás. De este modo, muestran desde procesos como castrar las colmenas o extraer la miel de los cuadros, hasta el envasado.
Los dos jóvenes, como el resto de profesionales, afrontan el problema de los costes de producción y, según asegura Morato, tampoco ven necesaria la figura de un veterinario como existe en el resto de explotaciones, que también conocen de manera cercana. Según asegura, “no nos serviría de nada porque el mayor problema a nivel sanitario es la varroa y los primeros en detectarla somos los apicultores”.
