La pintoresca villa portuguesa en la que se para el tiempo y te transporta a la época medieval

Portugal ofrece lugares idílicos a los turistas que acostumbran a visitar el país vecino. Sus numerosos pueblos en los que se pueden disfrutar mar y montaña con rincones difícilmente inigualables.

En este sentido, una de las villas de obligada visita es Óbidos. Una pintoresca villa medieval situada en la región centro de Portugal, a apenas 70 kilómetros de Lisboa. Entre sus encantos, destaca su laberinto de calles empedradas, especialmente en la Rúa Direita -con sus casas blancas con franjas amarillas y azules-, su imponente castillo y una gastronomía única en la que disfrutar de la 'gijinha', un licor macerado de guindas muy similar a la cereza.

La ciudad está rodeada por impresionantes murallas que datan del siglo XIV y que se pueden recorrer a pie, ofreciendo unas vistas de la villa y sus alrededores. Además, cuenta con un imponente castillo construido entre los siglos XII y XIV, que hoy en día funciona como un hotel histórico. Su arquitectura combina estilos gótico, manuelino y renacentista.

A todo ello, hay que incluir la Iglesia de Santa María, ubicada en el corazón de la villa, y la cual es famosa por su decoración renacentista y por los azulejos típicos portugueses.

Por último, en el ámbito religioso albergan numerosos turistas la Capilla de São Martinho y la Iglesia de San Pedro.

Este rincón de Portugal está a poco más de 430 kilómetros de Salamanca capital y para llegar hay que coger la A-62 hasta Guarda y, a partir der ahí, la A-23 para, finalmente, llegar a Óbidos.

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