Delito de odio: «A los moros como tú les exploto, les pago dos duros, me aprovecho de ellos y les quito 300 € como te he quitado a ti, por la cara»

Acusado de un delito de odio en concurso con un delito contra la integridad moral y un delito leve de amenazas, con la agravante de discriminación, J.T. se enfrenta a una condena de un año y seis meses de prisión, 3.120 euros de multa, así como cuatro años de inhabilitación para profesión u oficio educativos, en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre que le pide la Fiscalía. Según ha podido saber LA GACETA, el fiscal le reclama además 2.000 euros en concepto de indemnización en concepto de daños morales inherentes a la naturaleza humillante de los hechos.

Señala el fiscal en su calificación provisional, que el perjudicado es un ciudadano de nacionalidad marroquí vive con su familia en Salamanca, y es trabajador asalariado en una empresa del sector de la construcción.

Sobre las 18:30 horas del día 1 de junio del pasado año, este acudió a las oficinas de la referida empresa, en una localidad de la provincia, donde fue recibido por su gerente, el ahora acusado J.T., quien le abonó en efectivo la cantidad de 900 euros correspondientes a la nómina de mayo y le manifestó que los restantes 300 euros se los abonaría en días posteriores por falta de liquidez.

En los días sucesivos y ante la falta de pago, el trabajador telefoneó al acusado en varias ocasiones para reclamarle la parte de la nómina adeudada, contestándole este último con toda clase de insultos de tinte racista que, señala el fiscal, evidenciaban menosprecio y descrédito por su origen racial, así como otras expresiones amenazantes, tales como: «Hijo de puta, moro de mierda, que soy racista, a los moros como tú los exploto, les pago dos duros, me aprovecho de ellos y encima me f**** a sus mujeres y les quito 300 euros como te he quitado a ti, por toda mi cara».

«Ven a la nave moro de mierda, yo no tomo nada con un moro de mierda que oléis a mierda, yo lo tomo con un español, que hueles a mierda», le dijo en otra ocasión, así como: «Te lo he quitado porque me sale de los huevos, porque yo me aprovecho de los moros» o «soy racista, por eso te he echado porque no aguanto a los moros porque oléis a mierda...».

Prosigue el fiscal que el trabajador decidió grabar todas estas expresiones que entre otras muchas, el acusado dirigió hacia él durante las referidas conversaciones telefónicas, dado el cariz que estaban tomando los acontecimientos.

El tono empleado en las mismas por el acusado, señala el fiscal, era claramente despectivo y denigrante y la reiteración de su conducta, cristalizaron en una grave humillación para el afectado que menoscabó su dignidad personal.

Por todo ello, el Ministerio Fiscal acusa a J.T. de un delito cometido con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y libertades públicas reconocidos en la Constitución (delito de odio) en concurso de normas con un delito contra la integridad moral y un delito leve de amenazas. El fiscal le aplica además la concurrencia de la agravante de discriminación.

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