Así afecta el frío a tus defensas

Hay personas que resisten mejor el frío que otras, sin embargo, la realidad es que el frío tiene un fuerte impacto en nuestro organismo. La bajas temperaturas son causantes de enfermedades respiratorias muy comunes en épocas invernales como resfriados, gripes y laringitis. Además hay que destacar que en estas en climas más fríos los virus se desenvuelven con más eficacia y viven durante más tiempo.

El frío afecta a nuestro organismo provocando la vasoconstricción de la arterias produciendo una disminución de las defensas que le dejan la puerta abierta a los diferentes virus y bacterias. Esta vasoconstricción de las arterias también provoca que el corazón tenga que trabajar más para mantener el calor corporal aumentando el riesgo de infarto.

La piel es otro órgano que se ve gravemente afectado por las bajas temperaturas y por ello es más común notarse la piel seca y con heridas a causa del adelgazamiento de la piel en épocas de más frío. Estas heridas también pueden favorecer la entrada de virus y bacterias a nuestro cuerpo.

Cómo protegerse del frío

El truco más sencillo para protegerse del frío es llevar más abrigo. Las zonas del cuerpo más afectadas por el frío son los pies y la cabeza por lo cual un buen calzado y un gorro son fundamentales en días con temperaturas muy bajas para mantener el cuerpo en calor.

En cuanto a los materiales de la ropa hay que tratar de evitar los sintéticos ya que dificultan la transpiración del cuerpo y apostar por otros como la lana. Sumar varias capas de abrigo también ayuda a mantener ese calor corporal y a adaptarse mejor al quitarse prendas en lugares cálidos.

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