Los salmantinos beneficiarios de la Ley de la Dependencia aumentan casi un 30 % en solo cinco años

Un reciente informe del Ministerio de Derechos Sociales estima que en cinco años serán necesarios en España 261.400 trabajadores más dedicados al cuidado de personas dependientes. Supone un incremento del 53 %. Aunque no ofrece datos provincializados, supondría la necesidad de casi otros 4.000 profesionales más en Salamanca, una provincia con una alta tasa de envejecimiento y en la que el número de personas dependientes avanza a un ritmo muy elevado.

Solo en los últimos cinco años, los beneficiarios de la Ley de Dependencia han aumentado casi un 30%. Según los datos de la Junta de Castilla y León, en la provincia había el pasado año 19.295 personas que recibían algún tipo de ayuda o prestación vinculada a esta ley. Son 4.314 más que los que se contabilizaban en el año previo a la pandemia. Aproximadamente un millar de ellos reciben prestación residencial, mientras que el resto cuentan con ayuda a domicilio, acuden a centros de día o reciben otro tipo de prestaciones. Casi un tercio de ellos son los denominados grandes dependientes (Grado III), que son los que tienen derecho a una mayor ayuda. No obstante, no todos los beneficiarios de este tipo de ayudas son personas mayores. El 80 %, unas 15.400, superan los 65 años. Otros casi 3.300 tienen entre 18 y 65 años, y el resto, un 3,8 %, son menores de edad.

El aumento de los cuidadores no profesionales es superior incluso al registrado entre los beneficiarios de la Ley de la Dependencia. En los últimos cinco años, se han incrementado casi un 40 % al pasar de 3.779, en 2019, a 5.266, al cierre del pasado ejercicio.

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