Salamanca bate el récord de reclamaciones sanitarias de Castilla y León

La pandemia supuso un parón generalizado en Castilla y León. Apenas era posible poner un pie en un centro sanitario, por lo que tampoco había motivos -ni ganas- de presentar reclamaciones, pero con la recuperación de la actividad normal también han aumentado las protestas. Desde 2021 se ha retomado la tendencia ascendente y en el último año computado las quejas crecieron un 34% a nivel regional, pero más aún dentro de Salamanca.

En 2021 se registraron casi 5.100 reclamaciones en Salamanca. Al año siguiente ya fueron casi 8.100: un incremento cercano al 59% que bate todos los récords 'negativos'. En proporción al número de usuario, Salamanca también tiene las cifras más altas: son 254 reclamaciones por cada 10.000 usuarios. Solo se acercan a esas cifras las áreas de salud de Valladolid Oeste (213 por cada 10.000 usuarios) y Palencia (198,7).

Si la comparativa se hace por el número de actos asistenciales, en lugar de por el número de pacientes, Salamanca también lidera el ranking de las capitales de provincia, pero no el total, puesto que la cifra más alta está en 'otras zonas de Valladolid' como, por ejemplo, Medina del Campo, donde el grado de disconformidad es altísimo: casi 340 quejas por cada 100.000 actuaciones.

El principal foco de reclamaciones en Castilla y León se ubica en los hospitales -casi el 70% de todas las protestas dejadas por escrito-, pero también han aumentado las quejas en los centros de salud y en el caso de Salamanca se da una circunstancia llamativa. El centro de salud con más reclamaciones de toda la Comunidad fue el de Lumbrales.

Coincidiendo con una serie de protestas vecinales por la falta de médicos, el 99% de las protestas anuales sobre el centro de Lumbrales «se concentraron en envíos masivos de quejas en los meses de mayo y junio debido a la falta de personal», apunta el informe de Sacyl sobre 'Reclamaciones de los usuarios en el ámbito sanitario 2022'. «Destacan las reclamaciones por este mismo motivo de los ciudadanos de La Fregeneda (151) y de Robladillo (98) enviadas en junio por los respectivos ayuntamientos», añade.

En lo que no cambian demasiado las cifras de un año para otro es en los motivos que llevan a un usuario a presentar una queja formal contra el sistema sanitario. Sacyl informa de que casi la mitad del total de las quejas (el 48,4%) fueron por las largas listas de espera o las demoras.

Curiosamente, no son las esperas para ser intervenido quirúrgicamente las que más molestan, sino las esperas para una consulta y para pruebas diagnósticas, donde no es tan excepcional que superen el año.

Precisamente hace unos días que se publicaron los datos de lista de espera del segundo trimestre de 2023 -donde Salamanca lidera todos los registros negativos- y son las esperas para consulta externa con un especialista las que parecen más difícil de controlar.

La segunda causa de protesta (27,6%) es la inconformidad con la asistencia recibida. Aquí suelen venir acompañadas por protestas sobre la falta de personal, falta de continuidad en la asistencia, errores o las quejas por el transporte sanitario.

En tercer lugar figura la percepción de una mala organización o mal funcionamiento (14%). Citas que se suspenden, citaciones poco claras, normas de régimen interno, etc.

Tras el apartado de 'otros motivos' figura en quinto lugar el malestar con el 'trato' recibido, que llega al 4,5% de las reclamaciones.