Rechazo frontal a aumentar los estudiantes de Medicina
Los responsables de los centros aseguran que subir un 15% las plazas no solucionará la falta de especialistas
Aumentar un 15% las plazas del grado en Medicina el próximo curso 2023-24, lo que supondría crear 1.000 plazas en todo el país, es la solución planteada por los ministerios de Sanidad y Universidades para paliar la falta de especialistas. Sin embargo, la medida se ha encontrado con el rechazo frontal de los decanos, que aseguran que la medida, no solo no solucionará la escasez de especialistas, sino que generará un problema mayor al crear una bolsa mayor de médicos sin la acreditación correspondiente para trabajar en el Sistema Nacional de Sanidad.
Es un problema “multifactorial”, asegura Pablo Lara, presidente de la Conferencia Nacional de Decanos de las Facultades de Medicina al respecto y subraya que el número de plazas de acceso a las titulaciones de Medicina “no ha parado de crecer en los últimos 15 años”. En concreto, se ha pasado de 4.300 a más de 7.600 y hay el doble de facultades, hasta 46, pero, según insiste el decano “ese aumento del 75% no ha servido para paliar el déficit de médicos” porque, subraya, “se da el mensaje de que faltan médicos, pero en realidad lo que hace falta son especialistas”.
La propuesta depende ahora de su aplicación por las comunidades autónomas, pero el Ministerio de Universidad ha confirmado que el incremento de las plazas se podrá llevar a cabo sin que las facultades tengan que transformar sus planes de estudio y, como consecuencia, sin someter el aumento de plazas al sistema de verificación de las agencias de calidad. También el Ministerio de Hacienda ya está trabajando para incluir una partida presupuestaria para posibilitar la ampliación de plazas y dotar de más recursos a las facultades.
“Ese incremento presupuestario lo necesitamos ahora para mantener la calidad de la docencia con las plazas actuales”, indica Pablo Lara y alerta también de que la dotación presupuestaria se garantiza para el primer año, pero no para los siguientes cuando el incremento del 15% será progresivo y se ampliará a todos los cursos. En el caso de la Facultad de Medicina de la Universidad de Salamanca, la subida supondría pasar de 180 plazas a 207.
“Las capacidades de aumentar las plazas dependen de las posibilidades de financiación, y no hablamos de sueldos, sino de que los profesionales sanitarios tienen que acreditarse como profesores y en esas acreditaciones el 60% es la investigación, pero no se tiene en cuenta la asistencia, así que hay que potenciar la investigación todo lo que haga falta con grandes proyectos y también con la financiación del equipamiento, porque se financian los grandes equipos, pero tenemos problemas para cambiar los pequeños. Hay déficit en todos los sentidos”, asegura el decano de la Facultad de Medicina de Salamanca, José Carretero, y asegura que la partida anunciada por el Gobierno no da para modernizar las infraestructuras de las facultades ya existentes, y mucho menos para pagar a nuevos profesores.
La decisión del Gobierno tampoco es del agrado de los alumnos. El Consejo Estatal de Estudiantes ha señalado que antes de aumentar las plazas se deberían solucionar otros problemas que ellos consideran más urgentes, como el listado único de acceso o la calidad de las prácticas.