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El nuevo plan de remodelación del hospital público universitario La Paz, 'La Ciudad de la Salud', que fue diseñado por los salmantinos Juan Vicente García y Pablo Núñez, se financiará con 1.000 millones y tendrá 300.000 metros cuadrados para uso asistencial, docente y de investigación.
Al proyecto salmantino que se aprobó años atrás se le suma ahora toda una zona de investigación y desarrollo que irá ligada a la Universidad Autónoma para constituir «la mayor ciudad de la salud de Europa por tamaño, prestaciones e inversión», destacó la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
El arquitecto Juan Vicente García explica que «el proyecto del Hospital queda como estaba, pero se va a trasladar una parte de investigación y docencia a la parcela de la Universidad Autónoma», por lo que el sello salmantino seguirá extendiéndose en este mega-proyecto sanitario.
La construcción del proyecto salmantino ya comenzó con el edificio del Carlos III, que es uno de los bloques anexos al Hospital de La Paz y que ya está en obras.
La maqueta que Ayuso presentó esta semana para explicar cómo será la futura ciudad de la salud es un esquema al que luego hay que dar forma y sentido. Se convocará un concurso internacional al que podrán optar los más prestigiosos arquitectos del mundo y en el que el estudio salmantino que logró la adjudicación de La Paz también tendrá opción de asumir la responsabilidad de esta ampliación.
Otros dos importantes proyectos que constituyen la Ciudad de la Salud son la Unidad de Protonterapia, que está financiada por la Fundación Amancio Ortega, así como un edificio de Oncología Pediátrica -que es una de las señas de identidad de La Paz- y que, según avanzó la propia presidenta de la Comunidad de Madrid, cuenta ya con la financiación necesaria gracias a la participación de laboratorios y firmas internacionales.
La finalización total de las obras está prevista para 2032, según ha indicado Díaz Ayuso.
El arquitecto Juan Vicente García apuntaba al comienzo de las obras la relevancia del proyecto: «Este hospital estará pegando a las cuatro torres de la Castellana. Es un emplazamiento urbano y en el eje más importante de la ciudad junto a otros edificios emblemáticos que vertebran Madrid. Va a ser, junto con la construcción del nuevo Santiago Bernabéu, el colofón de la Castellana». Al igual que ha sucedido con el campo de fútbol, el precio final se está disparando respecto al presupuesto por el encarecimiento de los materiales.
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