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El sector servicios, con especial atención en la hotelería y la hostelería, verdaderos pilares en el impulso del turismo en la capital y la provincia, vive con «expectación» y una gran dosis de «preocupación» la propuesta del Gobierno de coalición de implantar en España una reducción de la jornada laboral y situarla en las 37,5 horas semanales. «Vamos a ver si sale adelante y en el caso de que sea así, ya veremos cómo nos afecta», señala Silverio Vicente, representante de los hoteleros en la Asociación de Hostelería de Salamanca, quien no oculta «la incertidumbre» que reina en el todo el sector.
Y no es para menos. Vicente está convencido de que la propuesta del Gobierno «será difícil de encajar» en un sector como es el hotelero. «Hay determinados puestos, como puede ser el de recepción que cuenta con tres turnos de 8 horas para cubrir un día completo. Con esta rebaja habría que meter un cuarto turno de 3 horas, y ¿quién estará dispuesto a aceptar un contrato de solo tres horas al día? Por tanto, esperemos a ver cómo se encaja todo esto», argumenta el representante hotelero.
Y aún va más allá en su análisis. Silverio Vicente está convencido de que esta reducción de la jornada laboral a las 37,5 horas semanales supondrá también «un mayor coste económico para las empresas», que, en su opinión, «podría llevar también a un encarecimiento del precio a los clientes. Habrá que esperar para saberlo», apostilla. Al menos hasta la próxima semana, que será cuando el Consejo de Ministros apruebe esta medida, después de aparcarlo en la sesión de este miércoles.
A pesar del incremento de los gastos dejados por el turismo en Salamanca en el último año, Vicente no elude las trabas que se le están poniendo al sector, entre ellas, el nuevo registro de turistas, con la multiplicación de los datos a la hora de su ingreso en un establecimiento hotelero. «Claro que se está dejando notar, porque esta medida está repercutiendo en una mayor lentitud en el servicio que se ofrece al cliente y eso no gusta», aclara el representante de los hoteles en la Asociación de Hostelería de Salamanca, quien reclama al Gobierno que «suavice» estas medidas y, si es posible, que «presente una alternativa que sea capaz de aliviar ese trámite a los clientes».
A pesar de todo, Silverio Vicente cree que el turismo irá en aumento, al tiempo que muestra su convencimiento de que el turismo seguirá creciendo en Salamanca, «porque la gente viaja más y presenta una mayor predisposición a salir de casa. Y en este sentido, Salamanca, donde el turismo es el principal recurso como generador de empleo y riqueza», es un buen ejemplo», apostilla.
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