Un Premio Cossío dedicado a la 'humanidad' de los sanitarios

El periodista salmantino Javier Hernández recibió este martes en Valladolid el Premio de Periodismo Francisco de Cossío por su reportaje 'La hija de la UCI' publicado en La Gaceta de Salamanca el pasado 15 de octubre, en el que narra la historia de una niña que ha tenido que vivir gran parte de su corta vida en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital debido a su enfermedad y cuyos padres renunciaron a la patria potestad. La publicación de este reportaje tuvo un gran impacto a nivel nacional y se hizo viral a través de las redes sociales.

En la entrega del reconocimiento, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, destacó en la entrega del reconocimiento «la enorme hondura humana» del trabajo profesional realizado por el periodista salmantino. «Querido Javier, nos has llegado al corazón», agradeció el máximo representante del Ejecutivo autonómico. «Contándonos la historia de esa niña en la UCI, se nos encoge el alma, y desde luego nadie puede quedar indiferente», subrayó ante el testimonio que relató de forma emotiva Javier Hernández.

Antes de recibirlo, la organización del Premio Cossío proyectó un vídeo donde el propio Hernández relató un «proceso largo y complicado» en el que el periodista tuvo que afrontar la dificultad de contar la historia manteniendo en todo momento el anonimato y los datos de la menor. Así mostró como los sanitarios se volcaron en ir más allá de su profesionalidad para convertirla en parte de su propia familia.

Durante su discurso, el periodista salmantino quiso agradecer en primer lugar a todo el personal sanitario que fue protagonista del reportaje: «Confiaron en que si nos iban a dejar entrar en la Unidad de Cuidados Intensivos, ibamos a hacer un trabajo digno y respetuoso». En esta línea quiso destacar la humanidad de los profesionales sanitarios y quiso defender la labor realizada por la sanidad pública. «Hay un ánimo generalizado de queja que nos lleva a la percepción de que la sanidad pública es mala salvo pocas cosas que se libran; y yo creo que es al revés y es muy buena». Puso el ejemplo de los pediatras protagonistas del reportaje que han criado a la niña mucho más allá de sus obligaciones, así como un caso real en el que una madre daba por perdido a su hijo porque el fármaco necesario para su vida tenía un coste de 1,4 millones. En este caso, incidió, también fue financiado por la sanidad pública.

El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, destacó el «periodismo de calidad» que se hace desde todas las provincias «incluso mejor que el nacional». «Todos sois ejemplo del mejor periodismo», agradeció a los premiados en un momento en el que «acecha la desinformación» por una parte, y «un inabarcable flujo de noticias», por otra. Por ello, abogó por un periodismo «serio, analítico, reflexivo y riguroso» que permita distinguir lo trascendente de lo irrelevante». «Un periodismo con alto contenido ético y firme apego a la verdad».

En este sentido, subrayó el gran compromiso de los medios libres con «la verdad» para lo que citó al escritor Gabriel García Márquez: «Recuperar la verdad en este caos de mentiras en el que vivimos».

Fernández Mañueco valoró el papel de los medios de comunicación como «auténticos guardianes públicos»y como un sistema de contrapesos y límites al poder para garantizar los derechos y las libertades bajo los pilares de la «independencia, pluralismo, rigor y contrapeso vital». Así, defendió desde la Junta un periodismo «libre, riguroso y profesional» que decida por sí mismo lo que es noticia y la forma de contarla «sin someterse a ningún Ministerio de la Verdad». «Contamos con vosotros, toda la sociedad para que sigáis velando por nuestras libertades con vuestra voz crítica e independiente».

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