Secciones
Destacamos
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
La preocupación por la entrada en vigor de la nueva ordenanza de rótulos empieza a palparse especialmente en las calles de la denominada Ciudad Vieja, las comprendidas en la almendra central que forma la avenida de Mirat, Canalejas, Vía Helmántica y paseo de Carmelitas.
Si en la zona patrimonial estaban más acostumbrados a este tipo de regulación, en el resto la preocupación es notoria. «Con la ampliación de la zona el efecto en los negocios será a gran escala», augura Natalia, que llevaba 6 meses trabajando cuando se aprobó la ordenanza. «Elegí este local porque apenas tenía que hacer obra y me lo podía ahorrar, pero ahora seguro que el toldo no cumple y tendré que cambiarlo». Uno de sus vecinos lo renovó el año pasado. «Te gastas 5.000 euros en un toldo y ahora lo mismo no vale. Aún no has recuperado la inversión que haces al abrir la tienda y ahora podemos enfrentarnos a más gastos», lamenta. «Nadie ha venido a darnos directrices. No tenemos ni idea de qué tenemos que hacer», reprocha otro empresario.
Otros se decantan por no hacer nada y esperar hasta que les llegue el aviso del Ayuntamiento por miedo a gastar un dinero que después no haga falta, como le ocurrió a algunos negocios de hostelería antes de la puesta en marcha de la Ley Antitabaco. Uno de los puntos que genera más inquietud entre los afectados por el cambio de normativa es la posible imposición de una memoria descriptiva del cumplimiento de las exigencias en materia de iluminación de fachadas y la justificación documental, con alzados señalando los focos y otras instalaciones, anclajes y ocultamiento de cables. Raquel regenta un establecimiento en la zona patrimonial y hace 10 años, cuando abrió su negocio, ya tuvo que pasar el filtro de la Comisión Técnico Artística para que aprobaran el diseño de su rótulo y de la fachada. «Al año y medio tuve que justificar el diseño del rótulo en todos pastel que estaban autorizados entonces, pero ahora he visto que no». Para evitar tantos dolores de cabeza Susana decidió adoptar una decisión radical: «Me exigían tantas condiciones que decidí ponerlo por dentro del escaparate», zanja.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.