Piel troquelada y cabina panorámica para el ascensor de las escaleras de Gran Vía
Los operarios trabajan en el montaje de la armazón metálica, una estructura que comienza a revelar algunos de los elementos estéticos y funcionales que distinguirán este nuevo equipamiento público
Salamanca
Miércoles, 19 de noviembre 2025, 14:06
El avance en la construcción del ascensor de la Gran Vía, el primero de carácter urbano en Salamanca, ya es visible desde hace semanas. Los operarios trabajan en el montaje de la armazón metálica, una estructura que comienza a revelar algunos de los elementos estéticos y funcionales que distinguirán este nuevo equipamiento público. Entre ellos, la incorporación de una piel troquelada en la torre y cristal panorámico en la cabina, dos recursos arquitectónicos que buscan integrar la intervención en su entorno y mejorar la experiencia de los usuarios.
Según confirmaba hace unos días el alcalde, Carlos García Carbayo, la previsión municipal es que el ascensor esté concluido «antes de final de año». «Para entonces va a estar finalizado, seguro», expresó, subrayando la relevancia de esta infraestructura destinada a mejorar la accesibilidad entre la Gran Vía y la plaza de La Parra, un punto clave de conexión entre el centro histórico y el paseo de Canalejas.
Un diseño que combina accesibilidad y estética urbana
El proyecto contempla un ascensor vertical de doble embarque a 180 grados, con capacidad para nueve personas y un peso máximo de 900 kilos. La cabina, de 1,40 metros de ancho por 1,50 de fondo, estará dotada de cristal panorámico, permitiendo vistas completas durante el recorrido y reforzando la sensación de amplitud en un punto tradicionalmente marcado por el desnivel.
La torre y la pasarela se ejecutan en estructura metálica ligera, favoreciendo la visibilidad desde la calle y reduciendo el impacto visual sobre las viviendas cercanas. Sobre esta estructura se colocará una piel troquelada, un revestimiento perforado que aportará identidad al ascensor, tamizará la luz y generará un efecto visual moderno sin resultar invasivo. Además, este acabado permitirá mejorar la seguridad y la ventilación natural del conjunto.
Un salto de 4,5 metros que responde a una demanda histórica
El ascensor salvará la diferencia de altura de 4,5 metros entre la Gran Vía y la plaza de La Parra, facilitando la movilidad en una zona que hasta ahora obligaba a utilizar las conocidas escaleras de La Riojana. Esta actuación, con un presupuesto de licitación de 287.286,34 euros, responde especialmente a una demanda histórica de los vecinos del barrio del Bretón, que llevaban años solicitando una solución accesible.
El arranque del ascensor se ubica en un espacio generado detrás del muro de granito, donde la estructura de hormigón permite configurar una entrada integrada en la escalinata. Bancos incorporados y nuevas áreas de estancia articularán el flujo peatonal y mejorarán la convivencia entre la nueva instalación y la urbanización existente.
La pasarela y el entorno se transformarán en una zona verde
En la parte superior, el acceso se realizará mediante una pasarela con una pendiente del 2% y una anchura mínima de 2,20 metros, conectando directamente con la plaza de La Parra. Junto a ella, el proyecto incorpora parterres vegetales escalonados, con especies seleccionadas conforme a la Estrategia de Infraestructura Verde de Salamanca. La incorporación de vegetación permitirá reverdecer un espacio actualmente dominado por la piedra y convertirlo en una zona de descanso y encuentro.