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El teniente coronel Pedro Merino Castro. ALMEIDA
Pedro Merino, jefe de la Guardia Civil en Salamanca: “El repunte de la ciberdelincuencia me preocupa. Vamos a atajarlo con más personal”

Pedro Merino, jefe de la Guardia Civil en Salamanca: “El repunte de la ciberdelincuencia me preocupa. Vamos a atajarlo con más personal”

El teniente coronel, que ejerció de ayudante del Príncipe y después Rey Felipe, se marca como reto conseguir que Salamanca sea un “destino atractivo” para los guardias civiles y luchar por lograr los mejores medios

Martes, 22 de marzo 2022, 12:04

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Pedro Merino Castro lleva su vocación en la sangre. Hijo y hermano de guardias civiles, tomó posesión hace menos de un mes como jefe de la Comandancia de Salamanca con el reto de “mantener el nivel de servicio y la cercanía al ciudadano” y conseguir que la provincia sea “un destino atractivo” para los agentes, tratando de “dotar de mejores medios y más actuales”. “La Guardia Civil es una entidad muy voluminosa y no siempre llegan las dotaciones a todos los sitios a la vez, pero hay que ser pacientes”, reconoce el teniente coronel, que atesora una brillante trayectoria. Ha pasado por el área de delincuencia económica de la UCO (Unidad Central Operativa), en prevención de blanqueo de capitales, como asesor de la jefatura del Estado Mayor en la Dirección General de la Guardia Civil y de ahí dio el salto en 2013 como ayudante o “chico para todo” del Príncipe y después Rey Felipe, antes de trabajar en la Moncloa en Seguridad Nacional.

–Tras ocupar cargos de altísimo nivel, ¿dirigir esta Comandancia no se le queda pequeño?

–No. Es casi como volver al origen, al año 98 cuando empecé de teniente en un puesto principal en Tenerife. Es volver a la Guardia Civil tradicional, la del servicio más próximo al ciudadano y también la más diseminada. Aquí, además se abre mi abanico de responsabilidades porque tocas todos los palos: seguridad ciudadana, tráfico, Seprona, armas...

–En los informes de criminalidad, Salamanca es una provincia relativamente tranquila, ¿dónde es necesario hacer más hincapié?

–Los ratios de delincuencia que tiene la provincia no son para nada alarmantes, pero es cierto que no estamos exentos de que la delincuencia cambie de sitio y pueda haber algún pico. Pero con los datos del inicio del año, me preocupa el incremento de la ciberdelincuencia debido al mayor uso de las tecnologías y quizá a una falta de concienciación. Nos preocupa el aumento de denuncias y hay que poner personal y medios para tratar de atajarlo.

–¿Se va a reforzar el equipo Arroba experto en ciberdelitos?

–Desde hace unos meses se pusieron en marcha en toda España los equipos Arroba que son personal especializado y muy seleccionado. Pero cada vez más, va a haber que reforzarlo en número. Pero no sólo el equipo Arroba lucha contra esta delincuencia, sino también en el puesto más lejano los agentes inician o recopilan la información primaria para resolver el caso.

–¿Van a formar a más personal en estos delitos?

–Sí. Los primeros que hemos seleccionado ya tenían experiencia previa. A partir de ahí debemos abrir el abanico de la formación a todos los compañeros, pero especialmente a los que quieran formar parte del equipo Arroba, que va a crecer y está bastante solicitado con muchos agentes voluntarios. Dependemos de los Presupuestos del Estado y de la oferta de empleo público. En el momento en que tengamos oportunidad de reforzarlo, así lo haremos. Esos huecos que se puedan ir dejando en favor de este equipo, se tendrán que cubrir con gente de nuevo ingreso.

“El cuartel de Santa Marta estará listo en dos años. También aumentaremos ahí la dotación de personal. No sabemos si de otros puestos o con agentes nuevos”

–En cuanto al tráfico de drogas, ¿está aumentando?

–El repunte del cultivo indoor de marihuana es un problema nacional. Recientemente ya desarticulamos un grupo dedicado a este cultivo. En el tráfico de otras sustancias, Salamanca está en un espacio geográfico significativo, junto a la frontera con Portugal y forma parte de la Ruta de la Plata. Sin ser un punto desorbitado de este tráfico de drogas, el tránsito que se mueve por la provincia nos afecta.

–Con el fin de la pandemia están repuntando los robos en viviendas, ¿es preocupante?

–Las restricciones de movilidad en pandemia hicieron bajar mucho los delitos contra el patrimonio y ahora es lógico que se vuelvan a retomar los índices de antes de 2020. No son para nada alarmantes. Hay que tranquilizar a la población porque no son hechos masificados, pero al concentrarse en determinadas áreas puede generar más alarma social. Desde mi incorporación se venían estableciendo dispositivos específicos para atajarlo desde la vía disuasoria, con patrullas visibles en la calle, y la parte de investigación. Las dos están abiertas. En esta parte preventiva, nos interesa contar con la colaboración ciudadana. Que a la mínima que vean algo, nos avisen, para evitar delitos.

–Los robos, como los más recientes en el alfoz, ¿se deben a bandas itinerantes o a ladrones de poca monta?

–Tenemos varias líneas de investigación y me permitirá que no descubra ningún dato.

–Justo en el alfoz ya se ha comenzado a construir el nuevo cuartel de Santa Marta, ¿qué supondrá esta infraestructura?

–Hoy en día, en el puesto principal de Santa Marta sus distintas unidades están diseminadas. La pretensión fundamental es tener a la unidad completamente reunida, que es lo básico. Y ahí, se va a incrementar también la dotación de personal aunque aún estamos estimando el número, si son de otros puestos o son agentes nuevos. Las obras llevan tres meses y van a buen ritmo. Va a ser una infraestructura moderna y cómoda. Estamos muy ilusionados. La obra va a durar entre 14 y 16 meses, más el tiempo de la dotación de medios... tardará un par de años para estar al cien por cien.

–El cuartel de Ciudad Rodrigo también está pendiente, pero parece que hasta 2026 no hay presupuesto para iniciar las obras.

–Me consta que la Dirección General tiene el cuartel de Ciudad Rodrigo entre sus prioridades. Está prevista su construcción sin poder determinar fechas porque la Guardia Civil tiene otras provincias con necesidades de infraestructuras. Pero es algo que nos urge.

“Con la guerra de Ucrania estamos atentos a posibles riesgos para infraestructuras críticas como el aeropuerto o la central hidroeléctrica”

–Hay cuarteles diseminados por toda la provincia, algunos ya viejos y con limitadas plantillas, ¿es partidario de la unificación de cuarteles para ser más operativo?

–Es el eterno dilema. Hoy por hoy no hay ninguna estrategia de reducir cuarteles ni cerrarlos. Una de las características de nuestra institución es que cuanto más próxima al ciudadano, mejor. No obstante, puede parecer que en puestos pequeños no se dé todo el servicio, pero hace años se pusieron en marcha los Núcleos Operativos de Servicio para coordinar esos pequeños cuarteles y que el servicio diario esté cubierto.

–¿Cómo se encuentra la provincia en cuanto a personal?

–En general estamos bien. Todo es mejorable y cuantos más guardias civiles vengan, mucho mejor. Siempre hay huecos que cubrir, pero somos de las comandancias que mejor cobertura tiene de Castilla y León. En cuanto a medios, vamos un poquito mejor. Recientemente nos han dotado con 18 vehículos, algunos híbridos y eléctricos.

–Los agentes llevan años reclamando chalecos unipersonales...

–Somos conscientes de la problemática pero me consta que la Dirección General está poniendo su ímpetu, y poco a poco nos van a ir dotando de chalecos para renovar los caducados.

–¿Hay recorte de desplazamientos en la flota de vehículos por el alto coste del combustible?

–De momento no. No tenemos indicación en ese sentido. Mantenemos la misma actividad. Lo que sí estamos estudiando es un plan de ahorro energético en el edificio de la Comandancia, buscando posibilidades de instalar placas fotovoltaicas y doble acristalamiento.

–La guerra de Ucrania, ¿les repercute en algún sentido?

–Directamente no. Estamos atentos a posibles amenazas o riesgos para reforzar la seguridad de infraestructuras críticas como en el aeropuerto de Matacán, la central hidroeléctrica y las vías de comunicación... Pero directamente no hay un efecto acción-reacción del conflicto. Lo que sí, nos hemos puesto a disposición de la Subdelegación para facilitar el acompañamiento a refugiados o traslados que sean necesarios para ayuntamientos y ONGs.

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