Una pedaleada solidaria con destino a Encón

El recuerdo de un viaje en bicicleta por Latinoamérica, un tío, dos sobrinas y unos playmobiles. Aquellos fueron los ingredientes que hace varios meses sentaron las bases del proyecto solidario Playcon. Una iniciativa del salmantino Óscar García, para ayudar a las mujeres de la cooperativa de trabajo 'Martina Chapanay' de Encón, una pequeña localidad argentina y que conoció durante un viaje en bicicleta por la región.

El pueblo está alejado de todos los centros urbanos de gran tamaño con los cuales comerciar y con conexiones muy precarias. En el pasado, la localidad subsistía gracias a la ganadería y la agricultura, sin embargo, el cambio climático y las prolongadas sequías han mermado la actividad económica llevando a muchas familias a sobrevivir a duras penas.

«Es un pueblo muy humilde en el que viven, quizás, entre 500 y 700 familias. El principal problema es que hay muy poca agua y la que hay tiene mucho salitre. Entonces no pueden usarla para la ganadería o la agricultura y esto empeora con las sequías», explica Óscar García.

«El año pasado estuve viajando por Latinoamérica y pasé por Encón. Ahí conocí a las chicas de la radio comunitaria y ellas me hablaron de su proyecto de empoderamiento femenino. Tienen una sala de elaboración de alimentos con hornos para que las mujeres de la zona pueden ir a cocinar alimentos que luego venden en la carretera a los viajeros. Además, tienen muchos talleres para enseñarle oficio a las mujeres y que puedan salir de la pobreza. Cuando volví de viaje quedé con la idea de hacer algo para ayudarlas y un día jugando con mis sobrinas se nos ocurrió la idea de Playcon», cuenta Óscar.

El proyecto consiste en realizar una recaudación de fondos para esta organización. Para ello, las sobrinas de Óscar, Iris y Luna, convencieron a sus amigos del cole de hacer unos playmobiles personalizado para entregar a cambio de donación. La meta es recaudar 4.375 euros, uno por cada kilómetro que recorrerá Óscar este verano en un viaje que lo llevará de regreso a Encón.

«La idea es visibilizar la situación de este pueblo y que la gente se anime a ayudar. Este año quería que mi viaje tuviera un fin solidario, así que quiero convertir cada kilómetro pedaleado en donaciones», señala.

Una iniciativa que en los últimos meses ha crecido de manera exponencial. «No me esperaba una acogida así. La idea fue locura de tres micos, mis dos sobris y yo. No pensé que realmente se podría convertir en un proyecto así de grande. Mi idea principal era sensibilizar a las niñas y que se dieran cuenta de lo importante de ayudar a otros. No me imaginé que el proyecto crecería y que tendría tanta repercusión. Muchos niños han querido donar sus playmobiles y otras personas se han sumado para recaudar fondos. Incluso, un músico de Cabrerizos se ofreció a hacer dos actuaciones y donar todo los beneficios al proyecto», relata que ya se encuentra en la primera fase de su viaje por Latinoamérica que finalizará en Encón.

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