Pascual Pérez, el salmantino de 90 años con una pasión incalculable por la filatelia y la numismática

Pascual Pérez Hernández es un coleccionista salmantino con una trayectoria de la que pocos pueden presumir. A sus 90 años, se encuentra enfocado en la numismática, pero, a lo largo de su vida, ha sido todo un apasionado del coleccionismo de sellos.

La afición de Pascual comenzó hace ya más de 70 años. «Empecé con los sellos gracias a un compañero del trabajo. Él era un aficionado y nos introdujo a los demás», recuerda. Tras varios años de afición, alcanzó el puesto de presidente del Grupo Filatélico de Salamanca, en el que se mantuvo alrededor de dos décadas. De hecho, en 2002, bajo su jefatura, se organizó una exposición mundial de filatelia en Salamanca, asistida por Correos, un momento que fue importante para él.

Más tarde, con el tiempo, Pascual reorientó su afición a la numismática, especialmente a la colección de euros. «Ahora me concentro en coleccionar monedas de euros de todos los países y años», señala. A diferencia de los sellos, donde la fuente principal eran las cartas, en el caso de las monedas se respalda en conocidos y amistades de la comunidad para ampliar su colección. «Tengo unas 2.000 monedas distintas de euros que recojo cada poco a poco. Cada moneda tiene su historia», afirma.

La enfermedad de su esposa supuso un punto clave en su vida. Durante los 16 años que duró la patología, Pascual se mantuvo siempre a su lado, por lo que se vio obligado a abandonar de algún modo, su participación en la filatelia. «Durante esos años, no podía asistir a las reuniones del grupo filatélico. Fue una etapa difícil», asegura. A pesar de ello, fue nombrado presidente de honor.

Pascual detalla que el mundo del coleccionista ha cambiado con el tiempo y que, aunque el interés por los sellos comunes ha disminuido, las piezas poco frecuentes siguen siendo demandadas. «La gente busca más rarezas», explica.

Para todos aquellos que deseen iniciarse en el coleccionismo de sellos, Pascual les brinda el siguiente consejo: «No se debe ser coleccionista por simple capricho, ya que cada sello tiene su historia y su valor. Es importante investigar y entender lo que uno colecciona».