La mortalidad desciende en la provincia a las cifras más bajas de la última década

Tras los años fatídicos de la pandemia, la mortalidad vuelve a descender en Salamanca. En el primer trimestre de este año se ha registrado en la provincia la cifra de defunciones más baja de la última década para este periodo. De hecho, es una de las provincias españolas en la que más han disminuido los decesos respecto al pasado año. Entre ellas, también se encuentran otras de Castilla y León, como son Soria, Segovia, Palencia, Valladolid y León.

Entre el 1 de enero y el 30 de marzo, en las trece primeras semanas del año, los registros civiles de Salamanca contabilizaron 1.023 defunciones, 41 menos que en el mismo periodo del pasado ejercicio y más de un centenar por debajo de las que se certificaron en los tres años previos a la prepandemia, según la estadística de estimación de defunciones semanales que publica el INE. El descenso de la mortalidad no puede vincularse a una mejor climatología, ya que las muertes atribuibles a las temperaturas, en este caso por ser demasiado bajas entre enero y marzo, son incluso más que las que se contabilizaron en los mismos días de 2024. Este año el Instituto de Salud Carlos III, a través de su sistema de Monitorización de Mortalidad diaria por todas las causas (MoMo), ha contabilizado 50 y el pasado año, 45. La diferencia sí es considerable si se compara con 2023, cuando en el primer trimestre se atribuyeron a las bajas temperaturas 302 defunciones.

Hay que recordar que después del desplome de los datos de decesos en 2023 tras ejercicios en los que Salamanca llegó a estar a la cabeza del país en incremento de muertes, en 2024 se volvió a producir un aumento del 3,6%, y el inicio de 2025 apunta a que continúa la misma tendencia.

Después del dato positivo de natalidad con el que se cerró 2024, en el que aumentó un 2% respecto al ejercicio anterior, los nacimientos vuelven a marcar tendencia de descenso. En los dos primeros meses del año, según los datos publicados este miércoles por el INE, han venido al mundo 302 niños, seis menos que el pasado año. El descenso se ha producido principalmente en febrero, en el que la disminución de nacimientos ha sido del 14,2%. Incluso así, la cifra de bebés nacidos en enero y febrero de este año superan las de 2019, 2020, 2021, 2022 y 2023.

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