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Jueves, 13 de agosto 2020, 11:07
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La crisis económica generada por la pandemia se refleja en el trabajo diario del Banco de Alimentos de Salamanca. La entidad, que acaba de presentar su memoria de 2019, reveló que en la actualidad atiende a 8.200 personas necesitadas, lo que supone un millar más que los 7.200 de finales del pasado año.
Aunque la cifra aún está lejos de los 15.000 beneficiarios que se llegaron a atender en 2014, durante la pasada crisis económica, el presidente del Banco de Alimentos, Godofredo García, admite que tienen “necesidad de más ayuda” para poder atender la demanda que “crece mes a mes”.
En lo que va de este año, de la despensa de la entidad solidaria han salido 980.000 kilos de alimentos, la mitad de lo previsto para 2020. El reparto se hace a través de 130 entidades y asociaciones de la ciudad y la provincia, una cifra que también empieza a aumentar. “Se ha creado una nueva asociación y otra que se había dado de baja ha vuelto a ponerse en activo para dar cobertura al aumento de personas en situación económica crítica. Al Banco de Alimentos llegan personas que se habían ya dado de baja y otras nuevas. Familias con hijos que hace cuatro meses vivían perfectamente pero que ahora con los ERTEs no tienen suficiente para vivir”, explicó Godofredo García.
El área social del Banco de Alimentos se sigue encargando de visitar a todas las entidades, comprobar que cumplen las normas y advertirles si lo hacen mal. Sobre el caso reciente de Ayusal, a quien el Banco de Alimentos cortó el suministro por irregularidades, Godofredo García reconoció que les “dolió” la decisión, que era la segunda vez que se tomaba, y que “ya no hay marcha atrás”. El presidente del Banco confirmó que los usuarios de Ayusal están siendo redistribuidos a otras ONGs.
Por otra parte, García recordó que además de los alimentos que envía el FEGA (Fondo Español de Garantía Agraria), cuyo próximo envío tendrá lugar a finales de septiembre, el almacén del Banco en Mercasalamanca también recibe numerosas donaciones solidarias. En lo que va de año, han llegado cinco grandes camiones con 100.000 litros de leche donados por empresas de Córdoba y Burgos, donde el Banco de Alimentos sólo paga los portes del transporte. “De suministro de leche ahora no hay problema”, corroboró García.
A ello se suman campañas solidarias con fondos donados por La Caixa, Empresa Familiar de CyL, Copasa y Colegio de Médicos. Unos fondos que el Banco utiliza para comprar más alimentos. También destacan, entre otros, los productos donados por centros comerciales, fruta y verdura del Ministerio de Agricultura, huevos (un millón de unidades el pasado año) donados por una granja de Alba de Tormes y kilos de papel de baño y cocina (el año pasado 9.924) entregados por la “papelera” de Salamanca.
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