La petición de los hosteleros: “Queremos que ahora se llame a los desempleados que cobran el paro”

El plan comenzó hace un par de semanas con el envío por parte de la agrupación de empresarios de la ofertas de trabajo de los negocios al Ecyl. El objetivo era que los trabajadores del Servicio de Empleo fueran los garantes de la legalidad del proceso para evitar tanto la posible oferta de contratos abusivos como las artimañas de los desempleados para cobrar la prestación sin trabajar aunque sean aptos para un puesto de trabajo.

Los técnicos analizaron el paquete de ofertas y contactaron con los posibles candidatos, comenzando con los demandantes de empleo que ya han agotado la prestación en vez de con todos los inscritos en las oficinas.

Por otro lado, algunas de las empresas han declinado completar el proceso de contratación en las instalaciones del Ecyl, donde estaba previsto que se ejecutara delante de los técnicos para evitar artimañas por parte de los desempleados.

Al final, tras contactar con más de 200 parados solo se han presentado 10 a los puestos que se ofertaban, algunos de ellos de difícil ocupación por las condiciones que exigían los empresarios. “Se ofrecen los puestos de trabajo a personas que ya no cobran el paro pero ingresan ayudas de otro tipo, por eso queremos avanzar en el plan con desempleados que sí perciben la prestación”, defiende Jorge Moro, presidente de la agrupación de hosteleros.

El matiz implica que si esos parados desisten de firmar contratos siendo aptos pueden ser sancionados, arriesgándose a perder la prestación por unos meses o de forma definitiva. A pesar de que el inicio no convence a las partes, el ánimo es seguir avanzando en la iniciativa, inédita al menos en Castilla y León y que se va a extender a sectores con problemas de falta de obra como la construcción —donde se ultima su puesta en marcha— y el transporte.

“Por nuestra parte la intención es seguir dándole forma”, defiende Moro, “hasta conseguir la fórmula más eficaz”. Entre otras cuestiones se pretende que las macrocontrataciones se pongan en marcha con más antelación para afrontar con las plantillas completas las épocas de más trabajo, ya que el actual plan se activó cuando la temporada estival prácticamente ya había comenzado en Salamanca. “Por nuestra parte la intención es seguir dándole forma”, defiende Moro, “hasta conseguir la fórmula más eficaz”. Entre otras cuestiones se pretende que las macrocontrataciones se pongan en marcha con más antelación para afrontar con las plantillas completas las épocas de más trabajo, ya que el actual plan se activó cuando la temporada estival prácticamente ya había comenzado en Salamanca.