Borrar
Estado actual de la noria de sangre, con los muros deteriorados y cubierta de vegetación. ALMEIDA
La noria de sangre de Huerta Otea: este será su futuro

La noria de sangre de Huerta Otea: este será su futuro

Descubierta hace seis años durante la demolición de unas casas en ruinas, la construcción hidráulica tradicional será rehabilitada por el Ayuntamiento dentro del proyecto Tormes+

Jueves, 2 de mayo 2019, 11:49

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Es “uno de los hallazgos más relevantes del patrimonio etnográfico salmantino de los últimos años”, según recoge un informe firmado por la jefa de Inspecciones y Obras y el arqueólogo del Ayuntamiento. En 2013, durante la demolición de una serie de construcciones ruinosas que se encontraban en la ribera en suelo municipal, los técnicos se toparon con este conjunto hidráulico tradicional.

Se encuentra “intacto” y, al parecer, no ha sufrido ninguna intervención “que haya podido menoscabar sus valores de autenticidad por intervenciones inadecuadas”. El caserío en el que se encontraba aparece documentado en un mapa del año 1900 y el elemento etnográfico figura en un plano del ejército de 1954. Aunque con claras dudas de si ya existía previamente, el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) data su origen en el siglo XVIII o XVI. De hecho, hay constancia, gracias a la panorámica de la capital dibujada por Anton Van den Wyngaerde en 1570, de que construcciones de este tipo existían ya en aquella época en Salamanca.

Es la noria de sangre o de tiro que se encuentra en Huerta Otea, a escasos metros de la pesquera de Tejares, y cuya existencia desconocen muchos salmantinos.

Invadidos por la vegetación, sus muros exteriores de mampostería de pizarra no permiten imaginar que, tras ellos, se conserva este elemento de la arquitectura hidráulica preindustrial que empleaba un sistema de tracción animal para la extracción de agua para regar las huertas próximas. Dado su buen estado de conservación, el Ayuntamiento ha dado el visto bueno a a su limpieza y rehabilitación para incluirla dentro del proyecto para ubicar centros de interpretación en las riberas. Dentro de la estrategia de desarrollo urbano sostenible Tormes+ cofinanciado con fondos FEDER de la Unión Europea, el Consistorio invertirá 60.014 euros en la recuperación de esta construcción, que cuenta con un sistema que ha continuado usándose hasta el pasado siglo.

Los técnicos apuestan por “la actuación mínima necesaria para devolver” la noria de sangre o, al menos, los elementos que ella se conservan a su estado original. Está integrada por una plataforma elevada por la que circulaba la caballería que movía su maquinaria, y por la rampa por la que subía el animal. Dispone de un pozo de tres metros de longitud y un pequeño pasillo de acceso a éste.

El desbroce y limpieza del entorno, así como del interior; la sustitución de la oxidada puerta actual; la retirada de la bomba de achique; la reparación y saneamiento de los muros; la instalación eléctrica y de iluminación; y la ubicación de señales que expliquen cómo funcionaba son las tareas previstas para dar una nueva vida a esta construcción. En estas tareas se emplearán unos cuatro meses, pero antes será necesario aprobar el proyecto y contratar las obras.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios