José Ignacio Juez, nuevo director general de Caja Rural de Salamanca: «Mi objetivo es impulsar el crecimiento»

«Es un gran honor asumir la dirección general de esta entidad». Esas fueron las primeras palabras del nuevo director general de Caja Rural de Salamanca, José Ignacio Juez Marín. La presentación del director general de la entidad tuvo lugar este miércoles, en la sede de Caja Rural de Salamanca, y contó con la presencia del presidente de la entidad, Ernesto Moronta, y del vicepresidente, Casimiro Martín.

En el acto de presentación, el nuevo director general, que lleva desde septiembre de 2024 ocupando el cargo de director general adjunto, se mostró agradecido a la entidad. «Es una gran responsabilidad porque Caja Rural de Salamanca es una entidad de referencia, tiene una profunda vocación de apoyo financiero y de ayuda a la sociedad», recalcó.

Durante su presentación, esbozó las líneas de futuro de Caja Rural de Salamanca, marcadas en su Plan Estratégico 2025-2027, centradas en tres pilares fundamentales: el crecimiento, la resiliencia y poniendo en el centro a las personas.

Sobre el crecimiento, Juez Marín apuntó que «la entidad lleva creciendo en los últimos años, pero cualquier empresa tiene que seguir haciéndolo, no se puede estancar, no puede ir para atrás», reconoció, haciendo hincapié en el esfuerzo que van a realizar en el crédito a las empresas, en el segmento urbano y en el segmento a jóvenes. Apuntó que, a través de la resiliencia, buscan la consolidación de la posición de la entidad y destacó el papel de la sostenibilidad. Por último, sobre la posición central de las personas, afirmó la importancia que tiene esta parte en cuanto al futuro de la entidad, tanto de manera interna con su plantilla como con sus socios y clientes.

«Mi objetivo es impulsar el crecimiento con una visión estratégica, competitiva y sostenible, que fortalezca nuestro liderazgo en el mercado y que continúe aportando valor a la sociedad», matizó José Ignacio Juez Marín, explicando la importancia de seguir fortaleciendo su balance y con su «estricta exigencia de cumplimiento normativo, de prudencia». «Hay que mantener nuestras fortalezas para continuar otros 100 años más. La entidad tiene unas oportunidades muy ilusionantes para hacer grandes proyectos», resaltó.

No se olvidó de destacar los tiempos convulsos que corren, explicando que «la mejor defensa de una empresa, especialmente una entidad financiera, es su capitalización, es decir, sus recursos propios. Nosotros tenemos muchas barreras de defensa, pero la principal es que tenemos un ratio de solvencia, que es lo que mide la capitalización de la entidad, en torno al 30 %, que está en torno al doble de la media de las entidades en ese país, con lo cual esa es realmente la mejor barrera defensiva de un entorno hostil, a veces cambiante y adverso en muchas ocasiones», explicó.

Por su parte, el presidente de la entidad, Ernesto Moronta, destacó la nueva etapa que comienza Caja Rural de Salamanca con José Ignacio Juez, «con muchos proyectos, con muchas ganas de crecer, fiel siempre a nuestro modelo y para seguir caminando con nuevos retos y nuevas ideas».

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