La gran reordenación del tráfico en torno a San Esteban que impacta de Gran Vía a Canalejas y Sancti Spiritus
Cambios de sentido y novedades técnicas para evitar el «giro imposible» de los autobuses en la Torre de los Anaya
La reordenación del tráfico en la glorieta del Concilio de Trento, al final de la Gran Vía, y en el Puente del Soto, en el arroyo de Santo Domingo, tendrá repercusión en buena parte de la ciudad. Todo para evitar el “giro imposible” que realizan los autobuses al pasar de Juan de la Fuente a la calle San Pablo y con el que se aproximan peligrosamente a la puerta de la Torre de los Anaya.
La solución que han encontrado los técnicos del Ayuntamiento, tras un concienzudo estudio, ha sido reservar el paso bajo el Puente del Soto para los autobuses, dándoles salida desde ahí hacia Rector Esperabé. Mientras, los turismos y vehículos de carga y descarga podrán circular por Juan de la Fuente hasta San Pablo, como hasta ahora.
Otro de los cambios que afectan a esta zona es que los vehículos podrán girar a la izquierda junto al Hotel San Polo para ir hacia Canalejas desde Rector Esperabé. Ya no se podrá entrar en la ciudad por este punto. Ante el cambio de sentido en el Arroyo de Santo Domingo, los autobuses accederán a la Gran Vía desde Canalejas a través de la calle Rosario, que también cambia de sentido. Para allanar el paso a las líneas 1, 3, 4, 8 y 9 se instalará en Canalejas, a la altura de la calle Jardines, un semáforo inteligente que se pondrá en verde cuando detecte un autobús, permitiéndole el paso hacia la calle Rosario.
Tal y como explicó este lunes el concejal de Tráfico y Protección Ciudadana, Ángel Molina, también tendrá acceso a la calle Rosario el tráfico procedente de la avenida de La Aldehuela y de Canalejas en sentido salida de la ciudad.
A la vez, también cambia la dirección de la calle Marquesa de Almarza. Esto permitirá a las familias de los niños que estudian en el colegio de Las Siervas dejarlos en la puerta del centro para después circular hacia la calle Rosario y regresar a la Gran Vía.
La última de las novedades afecta a los vehículos que bajen por la cuesta de Sancti Spíritus, que podrán girar a la izquierda en el cruce con la Gran Vía, y no solo a la derecha como hasta ahora.
Toda esta importante reordenación de la circulación en esta zona de la capital se pone en marcha para proteger el Puente del Soto, del siglo XVI, y reforzar la seguridad de los peatones, ya que algunas personas siguen pasando bajo el monumento aunque está prohibido.
Para frenar definitivamente el tránsito peatonal hacia el puente se ejecutará una obra civil que retranqueará la isleta frente al Convento de las Dueñas y ampliará la acera. Además, se eliminará la posibilidad de acceso desde la calle Rosario y se retirará el bordillo actual bajo el puente, zanjando la confusión con una acera.
La entrada en vigor de todos estos cambios está condicionada a la ejecución de los trabajos en el Puente del Soto, que se prevé estén finalizados en dos meses.
Según apuntó este lunes en el mismo acto de presentación de la reordenación del tráfico el concejal de Fomento, Fernando Carabias, “el proyecto ya está resuelto”, mientras que la licitación y la contratación de la obra “ya están iniciadas”. Carabias calcula que en unas semanas arrancarán los trabajos, que estarán terminados “en menos de dos meses”.
Por último, hay que recalcar que bajo el Puente del Soto solo podrán pasar los autobuses urbanos y metropolitanos; para el resto estará prohibido debido a su altura, ya que al llevar maletero exceden la del propio puente. Será, según Molina, una medida de protección también para el monumento.