Gerard F. Timoner: «Los derechos humanos que hoy nadie discute nacieron en Salamanca»

El maestro de la Orden de Predicadores, Gerard F. Timoner ha visitado a los frailes dominicos de San Esteban y Las Dueñas dentro de su visita pastoral. Como máximo responsable, reivindica el papel de la Escuela de Salamanca.

¿Cuál es el motivo de su visita a Salamanca?

—Es parte de la visita canónica a la provincia y un deber para nosotros entrevistarnos con toda la familia. Hay un sentido religioso ya que el Señor nos visita a todos. Estamos en primer lugar para ver y descubrir lo que nuestros hermanos están haciendo en Salamanca y también para nosotros es una peregrinación para ver los desafíos y debilidades.

¿Desde dónde ha iniciado el viaje?

—Yo soy de Filipinas, pero estamos asignados en Roma en Santa Sabina.

¿Qué supone para la Orden de los dominicos el convento de San Esteban y Salamanca?

—El Papa Francisco en su carta a la Orden por el Jubileo de Santo Domingo, 'Praedicator Gratiae' a la única escuela que menciona es a la de Salamanca. Hay una gran contribución de Francisco de Vitoria y de los frailes dominicos que han estudiado aquí. Incluso Domingo de Salazar, primer obispo de Manila, muy especial para mí personalmente.

¿Es un referente para la Orden?

—Sí. De hecho nosotros denominamos 'proceso Salamanca' al diálogo que se mantiene entre los teólogos de la Orden y los misioneros que han cruzado continentes. La Escuela de Salamanca es emblemática.

En dos años la Universidad prepara el V Centenario de la Escuela de Salamanca, ¿qué prevé la Orden?

—Se cumplirán 500 años de la enseñanza de Francisco de Vitoria. La Orden tiene 800 años y cada año tenemos un jubileo, en el actual estamos con Santo Tomás de Aquino. Amí parecer lo importante es que continuamos hablando de la Escuela de Salamanca más allá de jubileos. Mantenemos la presencia en la conciencia de los dominicos con el 'proceso Salamanca' y ya estamos viendo qué hacer para la celebración.

¿Le ha supuesto un impacto pisar el mismo suelo en el que estuvieron sus referentes teológicos?

—Sí, pero esa perspectiva es arqueológica. Para mí, lo importante es que el impacto de la Escuela de Salamanca ha llegado hasta hoy en nuestro mundo. Los derechos humanos, que hoy nadie discute, nacieron en Salamanca. Vemos muchas cosas como normales peroque no existían antes de la Escuela de Salamanca como el mensaje del Evangelio de caridad para todos y hermandad universal. Para mí, es clásica y eterna porque tiene un sentido en cada época.

¿Se han olvidado esos fundamentos?

—La gente puede haber olvidado la frase de la Escuela de Salamanca pero no la enseñanza porque es parte ya de nuestro mundo. Es un gran éxito como son los derechos humanos.

Ahora que se habla tanto de la conquista, los dominicos tuvieron un papel relevante.

—El papel de la Escuela de Salamanca ha sido vital para defender los derechos humanos. Estamos aquí para evangelizar, pero también para decir que los indios tienen derechos. Yo vengo de Filipinas, que es parte de las Indias, y también Domingo de Salazar, primer obispo de Manila.

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