Fase final para el IRNASA: el nuevo edificio estará listo en enero
La construcción del inmueble finalizará a principios de 2026 y comenzará la fase de equipamiento e invernaderos: la duración del traslado se prolongará durante un año
El Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC) encara la recta final de las obras de su nueva sede en el futuro Campus Agroambiental, un espacio concebido como edificio autosostenible, moderno y funcional que transformará la capacidad investigadora del centro.
La directora del IRNASA, Mar Siles, confirma que la entrega del edificio está prevista para enero de 2026, una infraestructura que será «un acicate» para reforzar los programas de excelencia en los que participa el instituto.
Con cerca de treinta nuevas incorporaciones este año y laboratorios de última generación, el traslado supondrá un salto cualitativo para la investigación agroambiental y biotecnológica de Castilla y León, con nuevas líneas centradas en edición genética, agricultura de precisión y adaptación al cambio climático.
El nuevo edificio del IRNASA-CSIC, ubicado en la zona de La Platina, marcará un antes y un después para la investigación agroambiental en Salamanca. Con una inversión de 12 millones de euros financiada por el Ministerio de Ciencia e Innovación y el CSIC a partes iguales, la sede contará con cuatro plantas que albergarán laboratorios transparentes, espacios abiertos y áreas comunes pensadas para fomentar la colaboración entre equipos.
«Las obras van bastante bien y el edificio, aunque es complejo como cualquier centro de investigación no tiene nada que ver con lo que tenemos ahora», explica Mar Siles. Sobre la actual sede reconoce que «los espacios se han quedado pequeños».
El nuevo IRNASA acogerá laboratorios más amplios y abiertos, con zonas de trabajo diseñadas a medida para los proyectos de investigación, además de una plataforma de genotipado, un fitotrón —cámaras que simulan condiciones climáticas extremas para estudiar la respuesta de las plantas— y una plataforma innovadora dedicada a la edición genética que se implantará en el nuevo edificio y en la que colaborará un investigador procedente del Reino Unido.
La directora del centro destaca también que el edificio «va a ser un motor para reforzar los programas de excelencia y estrechar los lazos con el Campus agroambiental de la Universidad de Salamanca, con mucha más relación con la nueva Facultad de Ambientales y Agrarias y con las empresas del sector». En esta nueva etapa, el IRNASA-CSIC se integra en proyectos como 'Ohfine', centrado en agricultura ecológica y de precisión, y se prepara para colaborar con el Centro de Transferencia de Conocimiento impulsado por la Diputación. Para esta nueva etapa también hay nuevas incorporaciones que han mostrado interés para trabajar con Abbioinnova, la incubadora de empresas biotecnológicas promovida por el Ayuntamiento.
Además del edificio principal, el plan prevé la construcción de invernaderos y naves auxiliares para completar el equipamiento, trabajos que comenzarán tras la entrega de la obra. «Tenemos el edificio en sí, pero hay que amueblarlo y equiparlo. En 2026 iniciaremos las estructuras externas y la adecuación de la parcela», señala Siles, que confía en que el traslado de investigadores se produzca entre finales de 2026 y 2027.