Los edificios de la Lista Roja del patrimonio se duplican en solo 3 años

En los últimos tres años, desde julio de 2021, se han duplicado las construcciones de la provincia que, por su avanzado deterioro, han pasado a formar parte de la Lista Roja que elabora Hispania Nostra, asociación nacional para la defensa y promoción del patrimonio cultural y natural. Ya son 60 los bienes ubicados en municipios salmantinos que integran este catálogo de construcciones en riesgo de desaparición. Sin embargo, este crecimiento no se debe, ni mucho menos, a un abandono generalizado de los inmuebles históricos de la provincia, sino a que las denuncias sobre el estado de los inmuebles y la participación ciudadana parecen haberse multiplicado. De hecho, muchos de los edificios que se han incluido recientemente, como el caserón neobarroco de la avenida Italia o el palacete del paseo de la Estación, ambos en la capital del Tormes y que se incluyeron en la lista en 2022, pero llevan décadas con evidentes signos de degradación. No es diferente el caso del acueducto de San Giraldo (Ciudad Rodrigo) o del castillo de Carpio-Bernardo, entre muchos otros.

Frente a las 52 construcciones que han entrado en la Lista Roja en la última década, solo cinco salieron en este período de ella para entrar en la Lista Verde, la del patrimonio rehabilitado. Se trata del Fuerte de la Concepción (Aldea del Obispo), que se recuperó en 2015; la iglesia de San Martín de Tours (Salamanca), en 2017, y el jardín histórico del Bosque de Béjar, en 2022, a los que en 2024 se han sumado la iglesia del Salvador de Rágama y el Puente Rando, en San Esteban de la Sierra.

La previsión es que en los próximos meses salgan también de la lista de edificios en peligro, al menos, otras tres construcciones ubicadas en la capital del Tormes. Después de más de diez años en ruina, el palacete neobarroco de la avenida de Italia cuenta ya con un plan de rescate para su conversión en un renovado edificio de viviendas. Tras un escaneado láser de su fachada, que será desmontada pieza a pieza para reconstruirla posteriormente, el interior del edificio de 1926 será vaciado para levantar un inmueble con seis viviendas y garaje subterráneo.

Tras el retraso de varios años debido al derrumbe hacia la calle San Pablo de uno de sus ruinosos edificios que lo forman, las obras del Seminario de Carvajal para convertirlo en un centro de eventos ya se encuentran en marcha. El Cabildo Catedralicio, a través de la fundación propietaria de esta construcción, ha vendido los terrenos a los promotores de la reforma, que permitirá recuperar un decrépito inmueble con más de tres siglos que permanecía en ruinas desde 1999.

Por su parte, la Diócesis también ha buscado una vía para que la capilla de la Misericordia, en la plaza de Cristóbal y el primero de los edificios de la capital que entró en la Lista Roja, pueda rehabilitarse. Este inmueble del siglo XVI pasará a transformarse en apartamentos turísticos gestionados por una empresa a la que la Iglesia cederá el inmueble para que lo restaure, lo convierta en alojamientos y lo gestione posteriormente.

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