«No te acostumbras a trabajar al sol»

Los aires acondicionados y los ventiladores pueden convertirse en los mejores aliados de cualquier trabajador ahora que las altas temperaturas veraniegas se hacen notar. Aunque estos aparatos no resultan válidos en algunos puestos de trabajo, como en el de los albañiles que realizan sus labores en la calle.

Gorras, botellas de agua y el refugio de una buena sombra a veces no son suficientes para hacer frente a la fuerza del sol, que no frena la subida de las temperaturas en este inicio del mes de agosto. Algunas empresas deciden cambiar sus horarios laborales, adelantando la hora de entrada, para que así los trabajadores no se vean sofocados en las peores horas del día. Por su parte, otras deciden no modificar el horario a pesar del calor.

«Nosotros tenemos el mismo horario que durante el todo del año. Intentamos buscar siempre las zonas de sombra, paramos más a menudo para beber agua», reconoce una de las trabajadoras de una construcción en una calle de la capital salmantina.

«El año pasado también sufrimos olas de calor durante el verano y nos tocó trabajar así. A esto no te acostumbras, es mucho calor y el cuerpo lo pasa mal, pero hay que pensar que son solo unos días, por eso intentamos hacer los trabajos en las zonas que sabemos que da la sombra en cada momento del día siempre que podamos», reconoce.

Los trabajadores reconocen que al realizar sus labores con extremos de frío o de calor «se pasa mal». «Con cualquiera de los dos extremos no se trabaja bien. El calor molesta, pero con el frío o las lluvias también se complica», explica la trabajadora. «Sí que es verdad que en invierno te puedes abrigar y en verano tienes que soportar lo que haya, por eso te agobias más», afirma, reconociendo que sus visitas a los supermercados para abastecerse de agua son continúas durante esta época del año.

Como aseguran también, intentan llevar la ropa más fresca posible para evitar el calor, aunque a veces esa tarea se les complica ya que siempre tienen que ir ataviados con un chaleco reflectante.

En esta construcción, después de trabajar por la mañana, continúan por la tarde, con un horario que va desde las 15:30 hasta las 18:30 horas, un periodo del día en el que el calor suele azotar con fuerza. «Personalmente, creo que el cambio de que se modifique el horario laboral a todas las empresas de construcción llegará», concluye.

Desde la Agrupación Empresarial de la Construcción de y Servicios Auxiliares de Salamanca (ACONSA), reconocen que «cada empresa normalmente toma las decisiones de acuerdo con sus trabajadores en el caso de adelantar la jornada o hacer algún tipo de cambio por el calor», explican. «Lo más normal en este sector en el caso de sufrir modificaciones en el horario es adelantar la hora de entrada si lo requiere la obra», afirman.

«Nosotros respetamos las decisiones que las empresas toman. Por suerte en Salamanca apenas tenemos incidencias. Sí que cuando nos piden consejo, aconsejamos reducir la exposición en las horas centrales del día», reconocen desde la propia asociación.

Además, también aseguran que hay ocasiones en las que adelantar la jornada laboral es complicado o incluso imposible, ya que si una obra se está realizando en un edificio de viviendas, no se puede hacer ruido en el espacio a partir de una determinada hora.

La RD Ley 4/2023, que modifica la normativa sobre las condiciones mínimas de seguridad y salud en lugares de trabajo, prohíbe trabajar al aire libre cuando se produzcan fenómenos meteorológicos adversos que afecten al correcto desarrollo de la actividad laboral cuando esta se desarrolle.

También explica que en el caso de que haya un alertas se tendrán que reducir o modificar las horas de desarrollo de la jornada laboral.

• Temas
• Salamanca ciudad
• Ola de calor
• Trabajo