«Cuando llegué poníamos las inyecciones con jeringuillas de cristal»

El Ayuntamiento de Macotera ha acogido esta mañana el acto de despedida de la enfermera Lucila Crespo Fradejas, que ha ejercido como enfermera del consultorio médico durante 44 años.

El alcalde de Macotera Benjamín Madrid García ha ofrecido a esta profesional unos obsequios de parte del pueblo y ha recordado que Lucila es una macoterana más, porque incluso ha vivido durante años en la localidad y sus hijos se criaron en las calles de Macotera.

«En 1962, el maestro don Francisco estuvo trabajando en Macotera durante 45 año, en 1863 hasta 1911 doña Catalina Sandin estuvo durante 48 años, doña Rosalia ha estado 45 años y don Ataulfo 44, cuando se jubilaron ellos, en el 1979, al año siguiente vino doña Lucila, enfermera. Son cinco personas que han dedicado toda su vida profesional al pueblo», ha recordado el alcalde.

Durante toda la mañana doña Lucila Crespo ha recibido visitas de pacientes que han querido agradecer su trabajo durante las últimas cuatro décadas. Otras tantas han acudido al acto de despedida y después en un vino servido en un bar de la plaza han tenido oportunidad de saludar a la enfermera que ya disfruta de su jubilación.

«Yo y mi familia nos consideramos macoteranos, siempre llevaremos al pueblo de Macotera por todas las partes, siempre lo tenemos en la boca», dijo Lucila Crespo antes de recibir un fuerte aplauso por parte de los asistentes.

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