Solemnidad y fidelidad a la bandera, en los actos de la Guardia Civil de Ciudad Rodrigo

Ciudad Rodrigo ha celebrado una mañana de actos en honor a la Guardia Civil con motivo del Día de la Hispanidad; una jornada que ha comenzado con rigurosos ensayos en la plaza de Herrasti, el espacio que acoge este evento por segundo año consecutivo. El público general, veteranos y la Corporación municipal ocuparon sus puestos alrededor del vallado en forma de bandera de España, en una jornada que congregó también a alcaldes de otros municipios y al presidente de la Diputación, Javier Iglesias.

La procesión con la Virgen del Pilar partió desde la Catedral de Santa María arropada por el cuerpo de la Guardia Civil, los párrocos y el obispo José Luis Retana, la música de la cornetas y tambores y los fieles, que se desplazaron a buen ritmo hasta la Plaza Mayor, para regresar nuevamente hacia Herrasti, donde la imagen quedó depositada de cara a la celebración de la misa al aire libre.

A su finalización, tuvieron lugar las condecoraciones y entrega de diplomas a los homenajeados veteranos, de más de 90 años, seguidas de unas palabras del capitán de la Guardia Civil de Ciudad Rodrigo, Pablo Javier Gatell Ruiz: "Cada palabra de gratitud del ciudadano nos recuerda por qué estamos aquí", señaló el capitán, quien mostró su agradecimiento y reconocimiento a todos los guardias civiles, "que entiende que ser Guardia Civil no es un trabajo; es un compromiso con España y con su gente". En su discurso también recalcó que el honor no se hereda, sino que "se conquista cada día", haciendo hincapié en la importancia de los valores.

La ofrenda de una corona en el monumento central de la plaza en honor a los caídos, a cargo de cuatro niños, estuvo marcada por el estentóreo disparo de una salva. Los cuidados protocolos y pasos firmes dieron paso por último a un convite en los aledaños de la plaza.

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