El salmantino que da vida al Capitán Trueno: «Por cosas del destino, acabé dibujando a mis personajes favoritos»
El artista José Revilla, de Ciudad Rodrigo, ha navegado con sus aptitudes por el mundo de la moda y el tebeo logrando dar vida al «Capitán Trueno»
Ciudad Rodrigo
Martes, 21 de mayo 2024, 14:18
Artista en moda y dibujo, cosechando loables éxitos en ambos, el mirobrigense José Revilla ha cumplido el sueño de dar vida a sus personajes favoritos de la infancia, entre otros muchos. Entre sus musas destaca «El Capitán Trueno».
¿Dónde empieza esta historia?
—Nací en 1963 en Ciudad Rodrigo y allí cursé mis estudios de EGB y Bachillerato para, a mediados de los 80, matricularme en el Centro Superior de Diseño de Moda de Madrid, tras superar numerosas pruebas y estudiar mi carrera. Era el «boom» de la moda en España y decidí orientar mi aptitud para el dibujo en este terreno. Allí conocí al famoso diseñador Manuel Piña, quien me pidió formar parte de su equipo, y colaboré con él durante dos colecciones para la Pasarela Cibeles, como ayudante.
¿De dónde viene y cuándo comenzó su afición al dibujo?
—Desde siempre; nací en una familia de artistas muy conocida aquí, así que fue algo natural el contacto con el arte. Desde muy pequeño empecé a dibujar, y dedicaba todo el tiempo que podía a hacerlo. Era la época dorada de los tebeos y tomé mis primeros contactos con ellos, al principio intentando imitar los personajes que más me gustaban, y posteriormente creando mis propias historietas.
¿Cómo se sumergió en ese mundo y con qué tebeos se quedaría?
—A finales de los 60 y principios de los 70 la oferta para un lector joven era amplísima. Había estilos para todos los gustos. Por mis manos pasaron ejemplares de muchos personajes inolvidables de aquella época, como «Roberto Alcázar» y «Pedrín» o «El Guerrero del Antifaz», «Pumby» o «Mortadelo y Filemón», pero de todos los personajes siempre he destacado dos: «El Capitán Trueno» y «El Jabato», que curiosamente, por cosas del destino, son los que con el tiempo he acabado dibujando.
¿Cómo saltó del lector empedernido al dibujante y creador?
—En realidad nunca me planteé dedicarme al cómic a pesar de llevar toda la vida practicándolo, y a principios de los 2000, un día navegando por internet fui a parar a un foro dedicado al «Capitán Trueno», y allí contacté con gente muy interesante. Una cosa llevó a otra y unas páginas de «El Jabato» que había realizado con un guionista llegaron a manos de Víctor Mora, creador de Trueno y Jabato. Como se acercaba el 50 aniversario de «El Jabato» la editorial nos contactó para realizar una aventura-homenaje dedicada al personaje. Así, en 2008 apareció «La Hermandad de la Espada», el primer álbum de las nuevas aventuras de «El Jabato», que en principio iba a ser un ejemplar único, pero que se amplió con nuevas entregas debido al éxito, en este caso conmigo en solitario. Así han ido apareciendo diferentes títulos: «El tirano de Rakhum», «El Cetro de Minos» o «Traición en Rodas», todas ellas intentando mantener el espíritu original. En 2016 la editorial me encargó «Las Nuevas Aventuras de El Capitán Trueno», y en 2017 se publicó un primer álbum titulado «El Círculo de Fuego».
¿Cuál es el mayor regalo de toda esta aventura entre viñetas?
—Nunca he trabajado pensando en recibir premios o reconocimientos. Sin embargo, si de algo me siento orgulloso, es de haber colaborado en la realización de estos personajes tan míticos y de haber conseguido que sus lectores de toda la vida los lean y disfruten como si el tiempo no hubiera pasado, además de la suerte de haber llegado a tiempo de conocer personalmente y compartir cartel y tiempo con muchos de los dibujantes que en su día realizaron aquellos maravillosos tebeos gracias a los cuales nació mi afición. Ese quizá haya sido mi mayor premio.