Un paseo por el arte más «salvaje» para celebrar el Día de la Madre

Este yacimiento contiene arte rupestre prehistórico perteneciente al Paleolítico superior, fue descubierto en el año 1988 por Manuel Santonja, declarado Bien de Interés Cultural en 1998 y Patrimonio de la Humanidad en 2010, como extensión del conjunto arqueológico del Vale do Côa, en Portugal.

Hasta la fecha se han inventariado 448 figuras grabadas sobre las rocas, en las que se distinguen tres técnicas diferentes: piqueteado, incisión y abrasión. Las obras representan animales, signos abstractos y figuras antropomorfas, aunque las especies más recurrentes son équidos, bóvidos, cérvidos y cápridos. También se han documentado, aunque en menor medida, otras especies como felinos y cánidos.

El enclave tiene una extensión de unas 45 hectáreas y engloba las localidades de Serranillo —pedanía de Villar de la Yegua—, Martillán —pedanía de Villar de Argañán—, y Castillejo de Martín Viejo. El centro de recepción se encuentra en el término municipal de Villar de la Yegua, y es posible aparcar fuera de las instalaciones, así como llegar a pie mediante rutas senderistas, debido a su proximidad con varios municipios de la zona.

El área en la que se encuentra el yacimiento arqueológico, a orillas del río Águeda, es de alto valor paisajístico, pertenece a la Red Natura 2000 y es una Zona de Especial Protección para las Aves, por lo que el yacimiento se refuerza con su alto atractivo de turismo de naturaleza. Siega Verde impulsa, con regularidad, nuevas formas de conocer y dar vida al yacimiento, con visitas teatralizadas nocturnas, talleres escolares, conciertos con curiosos instrumentos y, recientemente, el primer paseo a caballo.

Cómo llegar desde Salamanca

Desde Salamanca se puede llegar a Siega Verde por la autovía A-62 dirección Portugal. Después de 82 kilómetros hay que tomar la salida 325 hacia Ciudad Rodrigo este, para, desde ahí, seguir las indicaciones hacia la carretera de Lumbrales, la DSA-470.