Muere el sacerdote Florencio González Martín

La Diócesis de Salamanca ha comunicado con pesar el fallecimiento del sacerdote Florencio Jesús González Martín a los 82 años, ocurrido en la madrugada de este domingo en la Residencia diocesana. Su muerte coincide simbólicamente con la celebración de la Pascua del Enfermo, una jornada dedicada a quienes sufren y a aquellos, como él, que consagraron su vida al servicio y acompañamiento de los más vulnerables.

La capilla ardiente ha sido instalada en la Sala Jovellanos de la Casa de la Iglesia, donde los fieles pueden acercarse a despedirse de quien fue un referente de humildad y vocación pastoral en la diócesis. El funeral de exequias se celebrará este lunes, 26 de mayo, a las 11:00 horas, en la Capilla Mayor de la Casa de la Iglesia.

Natural de Vitigudino, donde nació el 24 de diciembre de 1942, Florencio González fue ordenado sacerdote el 9 de julio de 1967 por el obispo Mauro Rubio. A lo largo de sus 57 años de ministerio, desempeñó numerosas responsabilidades dentro de la diócesis, caracterizándose por su cercanía, su sensibilidad social y su espíritu de servicio.

Fue coadjutor de la parroquia de Cristo Rey y ejerció como administrador del Seminario Diocesano San Carlos Borromeo. Su compromiso con los más necesitados lo llevó a ser capellán del Centro Penitenciario de Topas, del Centro de Salud Mental, del Centro de sordomudos y del Servicio de Asistencia Religiosa Católica (SARC) en hospitales y centros públicos.

También desarrolló una intensa labor educativa como profesor de Religión en los colegios Nebrija y Atenea, y ocupó cargos de responsabilidad como delegado de la zona de Robliza, miembro del Consejo Presbiteral, arcipreste y miembro del Consejo de Consultores.

En sus últimos años, Florencio González sirvió en distintas parroquias rurales como Matilla de los Caños del Río, Villalba de los Llanos, Tornadizos, Calzada de Don Diego y Canillas de Abajo. Fue también rector del Santuario de Nuestra Señora del Cueto, donde cultivó una especial devoción mariana que marcó profundamente su vida espiritual y su acción pastoral.